Rihanna es considerada un icono de moda y belleza, por ello cada look que la cantante debuta en público es digno de un análisis para informarnos sobre nuevos tips o tendencias que se aproximan.
Ese fue el caso del look que RiRi lució para el estreno de la película ‘Queen and Slim’, donde evidentemente se robó el show. Para la ocasión, la empresaria usó un vestido de seda negro vintage (con silueta de kimono) de John Galliano. La pieza, que tenía un escote profundo en ‘v’ y al interior, un forro color champán que creó un lujoso contraste.
Sin embargo, un sutil detalle con el que Rihanna completó su look fue su manicure. Ella dejó las uñas extravagantes y en su lugar, optó por un diseño de carey (también conocidas como caparazón de tortuga) que le dio el toque necesario de glamour y estilo.
De esta forma, Rihanna nos demuestra que el carey está lejos de desaparecer, y, muy por el contrario, ha sabido infiltrarse exitosamente en el mundo de la belleza para ser uno de los diseños de manicure más geniales que hay.