Los perros asistentes son de gran ayuda a las personas que tienen dificultades en su salud. Lo mismo le sucedió a la familia australiana, quienes llevaron a sus hijitos a un lugar campestre acompañados de su labrador que se desempeña como asistente.
Hunter es el perro asistente que había estado en otras oportunidades de vacaciones con la familia sin tener problemas, incluso anteriormente ya habían acudido “Big 4 Marion Holiday caravan park”, situado en las afueras de Adelaida en Australia.
Sin embargo, el personal del camping decidió rechazar la entrada porque “no se permiten mascotas en las instalaciones”.
Los tres pequeños Zach, Mystique y Logan necesitan la vital compañía de Hunter, ya que además de sufrir diferentes grados de autismo padecen de otras enfermedades. Por ejemplo, Mystique tiene problemas de audición y Logan una lesión cerebral adquirida y epilepsia.
Lo más lamentable fue que la familia de Murriana Reese, mamá de los niños, había anticipado la presencia del perro al momento de hacer la reserva y cuando llegaron al lugar, les denegaron la entrada del peludito. La familia mostró el carné sellado por el gobierno de la región del Sur de Australia que acredita a Hunter como perro de servicio.
Los dueños de Hunter pagaron alrededor de 1500 dólares por la reserva, pero al final se lo reintegraron como para costearse otras vacaciones
“Logan se quedó completamente traumatizado de que no se le permita tener a Hunter con él y voy a tener que lidiar con eso y tratar de calmarlo”, señaló la padre de los niños
La madre de los niños utilizó su cuenta personal de Facebook para denunciar este hecho y se volvió viral en Internet. Muchos usuarios mostraron su apoyo a la familia del pequeño Hunter.
“Acabamos de ser directamente discriminados por el parque de caravanas Big 4 Marion Holiday, al rechazar la entrada de nuestro perro de asistencia que anteriormente se había alojado en este alojamiento. Nuestros dos niños autistas ahora están en crisis porque su respiro a corto plazo de tres días en Adelaida se ha interrumpido debido a esta discriminación directa. Haré un reclamo a través de la igualdad de oportunidades contra ellos”, se lee en la publicación de Facebook.
Wapa, la familia del perro asistente Hunter pretende demandar al lugar campestre con una multa de hasta 10 mil dólares australianos por el atropello vivido.