Empezar a caminar es uno de los grandes acontecimientos en la vida de todo ser humano. A partir de los nueve meses algunos bebés dan sus primeros pasos, dejando atrás el gateo. Por ello la decoración de su ambiente personal debe contribuir en su aprendizaje y cuidado.
Es por ello que la arquitecta Cinthya Arana brinda algunas recomendaciones para decorar la habitación de tu bebé a partir de algunos cambios en el espacio, que ayuden al niño a tener una mayor autonomía en sus rutinas diarias y que, deberán ir evolucionando a medida que crezcan.
En primer lugar, ¿conoces la filosofía Montessori? Se trata de un sistema que se caracteriza por idear un ambiente simple pero ordenado, estético y preparado, donde cada elemento tenga una razón de ser en el desarrollo de los niños. Lo ideal es adecuar la habitación de tu bebé de tal manera que puedan darles mayor libertad de desplazarse sin problema alguno, valiéndose por sí mismos.
Evita los colores fuertes y excesivos en las paredes de la habitación del pequeño, deja que los elementos que coloques tomen protagonismo. El uso de tonos neutros y cálidos te ayudarán a conseguir un ambiente tranquilo y libre de sobre estimulaciones. En todo caso, si te gusta el color, puedes utilizarlo de manera muy sutil en algún elemento; por ejemplo, en el frente de un cajón, algún cubículo o en otros complementos decorativos.
El espejo es un elemento que ayuda a que el niño pueda auto reconocerse cuando aún es muy pequeño. Por otro lado, la barra es ideal para los bebés a partir de los 7 u 8 meses, pues les anima y les da la oportunidad de levantarse solos y comenzar a caminar. Recuerda que el suelo debe estar libre de objetos para su cómodo desplazamiento.
Todo el mobiliario que decidas incluir en la habitación como sillas, cama, mesitas, entre otros; debe encontrarse a la altura del niño y no del adulto. Así, evitarás caídas indeseadas y ayudarás a que el bebé se sienta cómodo transitando por este espacio, ya que tendrá todo lo que necesita a la mano.
Haz tus propios juguetes, usando madera o tela, los objetos muy elaborados limitan la creatividad del menor. Asimismo, puedes incluir algunos imágenes o fotografías de la naturaleza como animales o flores, bajo una misma temática y guardando armonía entre sí.
No olvides que estos consejos de diseño y decoración, se pueden adaptar fácilmente a distintos ambientes, contribuyendo al rápido aprendizaje donde el niño se desenvuelve a su propio ritmo, desarrollando su creatividad al máximo.