¿Sabes por qué los antibióticos se toman cada ochos horas?

Es importante señalar que los antibióticos se deben tomar según prescriba el médico o según consta en la receta. Cierto es que lo más habitual es tomarlos cada 8 horas, pero también hay antibióticos que se deben tomar cada 12 horas, e incluso cada 24 horas.

¿Sabés por qué?

Cada toma contiene una determinada cantidad de principio activo. Al tomarla, éste pasa a la sangre y fluye por todo el organismo. Cuando el organismo empieza a eliminarlo a través de los riñones o el hígado, la concentración disminuye. Este proceso puede durar aproximadamente ocho horas. Antes de que la cantidad de antibiótico en la sangre sea insuficiente es necesaria una nueva toma. Pero no es tan sencillo como esto, si se retrasa mucho la toma puede no bastar una nueva ingesta. 

Para que un antibiótico haga efecto, debe llegar a la parte del cuerpo donde se localiza la infección en cantidad suficiente y de forma continuada. Eso se logra en el llamado estado de equilibrio estacionario, es decir, cuando la cantidad de fármaco que entra al organismo es igual a la cantidad que sale y se mantiene una concentración constante en sangre.