COVID-19: Ómicron no tiene como síntoma la pérdida de olfato
Únete al canal de Whatsapp de Wapa
La nueva variante de coronavirus es la Ómicron y es la que más mutaciones acumula en su genoma. Los cambios se están dando en los síntomas que padecen los infectados.
En España y en otros países se están mostrando los primeros indicios, que indican que los síntomas son diferentes a las de otras cepas. En las primeras olas, era normal que los pacientes sufran la pérdida de olfato, pero ahora es muy poco frecuente o hasta nula.
MÁS INFORMACIÓN: Ómicron: EE.UU. sufre por el incremento de casos de la nueva variante de la COVID-19
El caso que más llamo la atención sucedió en Noruega. El 26 de noviembre en Oslo, un restaurante que tenía 111 personas, y todas vacunadas, se hicieron pruebas de antígenas un día antes. Uno de los clientes había llegado de Sudáfrica, donde se originó la Ómicron.
Lamentablemente, la nueva variante se infectó hasta el 74 % de todas las personas involucradas. El 12 % perdió el olfato, pero los síntomas más frecuentes fueron tos, moco y cansancio. Ninguno de los contagiados tuvo la necesidad de ser hospitalizado.
El vocero de la Sociedad Española de la Atención Primaria, Vicente Martín Sánchez, indicó que la mayoría de contagiados por la cepa sudafricana presenta un cuadro similar a la de una alergia.
“La pérdida de olfato es cada vez menos común. De hecho, ya con la variante delta se daba con mucha menos frecuencia”, indicó el catedrático de medicina preventiva de la Universidad de León.
Agregó: “Si la gente sigue haciendo vida normal pensando que si no ha perdido el olfato no tiene COVID-19 contagiará a todo su entorno. No puede ser gripe porque este virus aún no ha aparecido este invierno”.
En tanto, la jefa de infecciones del hospital Universitario Marqués de Valdecilla de Santander, Carmen Fariñas, indicó que está viendo las dos caras de la ómicron.
“Vemos cuadros con estornudu, tos, rinorrea [goteo de la nariz], dolor de garganta más moderado y menos fiebre que con otras variantes”, explica la médica. “Es muy parecido a un catarro normal pero tal vez con un poco más de cansancio y malestar. Ya no vemos la pérdida de olfato y gusto que había sobre todo con la variante alfa [también conocida como británica y aislada en diciembre de 2020]”, sost