Pulpito de amor, el programa que ayuda a fortalecer el neurodesarrollo de bebés prematuros tras la pandemia

Tras la pandemia del coronavirus en el Perú, enfermeras del Hospital Guillermo Almenara crearon un proyecto llamado Pulpito de amor para brindar el calor materno a los bebés prematuros y puedan descansar sin estrés. Este exitoso programa inició a mediados de diciembre de 2020.

"A raíz de la pandemia, lamentablemente las visitas fueron restringidas. Nosotros antes de la pandemia, teníamos el programa Mamá Canguro, donde las mamitas podían venir, estaban todo el día y trabajábamos con ellas y sus bebés", contó la Lic. Carmen Marlene Huaranga Atau, especialista del servicio de Neonatología, a Wapa.pe.

El referido nosocomio se convirtió en un centro de COVID-19, por ello, las visitas de las madres se tuvieron que restringir. En ese momento, las especialistas buscaron la manera de ayudar a los bebés prematuros que no iban a poder ver a sus progenitoras, así que se le ocurrió hacer los pulpitos de amor.

"Cuando nosotros nos enteramos que en Dinamarca hace tres años, empezó una corriente que son unos muñecos de apego y ellos empezaron a trabajar y tuvieron muy buenas respuestas con ciertas observaciones como evitar las infecciones y que el material sea fácilmente de desinfectarse", explicó la enfermera Carmen Huaranga.

"Cuando nos dio la inquietud, empecé a aplicarlo. Tuvimos la ayuda de la Fundación de Prematuros, quienes nos dieron los pulpitos. Y nosotros lo hemos colocado en los bebés. Yo también como sé tejer a crochet, porque no es un muñeco nada sofisticado, simplemente es un muñeco que va a permitir mediante los tentáculos similar que está el cordón umbilical del bebé, de modo que el bebé no se va a sentir tan solo o que está un ambiente tan inhóspito", añadió la experta.

Asimismo, la Lic. Huaranga Atau indicó que la incubadora brinda calor a los recién nacidos, pero no le da seguridad ni la compañía como las caricias de una madre. También, la experta manifestó que más de 350 bebés nacen cada mes en el Hospital Almenara, de los cuales, 120 a 140 son prematuros.

"Tenemos 12 pulpitos individualizados, es para un bebé. Un bebé se da alta y lo vuelvo a usar en otro bebé, eso no se puede porque habría un riesgo de infección. A las mamás se les entregan (los pulpitos) junto con sus bebés y se van".

En la Unidad de Neonatología, hay 24 bebés prematuros hospitalizados, de los cuales 12 bebés se encuentran estables. "Con estos 12 bebés podemos trabajar, cuando el bebé está inestable el personal de salud tiene que hacer muchas actividades por lo cual no se puede poner al pulpito, pero cuando el bebé se estabiliza, inmediatamente las colegas me avisan y ponemos al pulpito".

De acuerdo con Carmen, las expresiones de los bebés cambian cuando tienen un pulpito de amor a su lado. "Se calman, no están con el ceño fruncido, no están desorganizados como si estuvieran haciendo una pataleta. Estos bebitos logran calmarse, logran sentirse acompañados".

Del mismo modo, la enfermera peruana contó que los bebés prematuros que ingresan con 26 o 27 semanas, salen de alta luego de tres meses.

"Le pongo el pulpito, y le digo 'mira, relájate, te va a ayudar'. Me voy dando cuenta que se sienten más tranquilos y ellos muchas veces sonríen".

Por otra parte, Carmen se sintió identificada con las mamitas que tienen lejos a sus recién nacidos, ya que ella sufrió un accidente que la alejó de su hija cuando era bebé.

"Cuando estaba gestando de mi segunda hija tuve un accidente de tránsito grave y mi hija nació ese día porque me hicieron una cesárea de emergencia. Luego tuve que ir a cuidados intensivos y estuve separada de mi hija, estuve bastante tiempo separada".

"El hecho de no poder ver a mi hija, de verdad que fue un dolor grande. Mi hija salió menos mal muy bien, pero yo estaba totalmente golpeada por el accidente. Entonces, sé muy bien lo que es no estar cerca de la persona que quieres, es duro, me sentí identificada con las mamitas. Me dolía, es difícil para una madre despegarse de un hijo. Cuando salen de alta para mí es una alegría. Nosotros tratamos de sacarlo adelante".

Por último, recordó a los padres y madres de familia que han tenido bebés prematuros continuar con terapias de medicina física para prevenir problemas de conducta en la niñez.

Cabe mencionar que los pulpitos de amor están elaborados a mano con lana hipoalergénica previamente desinfectada. Cuando el bebé prematuro es dado de alta luego de tres meses, se lleva a casa su pequeño peluche.

Wapa, si deseas unirte a esta noble causa, puedes tejer pulpitos de amor para los bebés prematuros del mencionado hospital de EsSalud. Comunícate con la enfermera Carmen Huaranga al 995 479 283.