Reportero llora en vivo por la tragedia que vive su país [VIDEO]

Los ecuatorianos sufren una de las peores tragedias que quedará inmortalizada en la historia de su país. Personas fallecidas por coronavirus yacen las veredas y pistas de los barrios de Guayaquil, la ciudad de Ecuador más castigada por el SARS-CoV-2. Los familiares de los fallecidos han entrado en desesperación al vivir esta situación y un periodista no pudo evitar romper en llanto ante la terrible situación.

Carlos Julio Garumendi se quebró en vivo cuando iba a realizar un informe sobre la cruda realidad que vive su país ante los estragos del coronavirus. El hombre de prensa se encontraba en las afueras de una iglesia, y al escuchar sonar las campanas no pudo cumplir con su labor informativa, alcanzando solo a decir a sus compatriotas que se queden en casa.

El reportero de RTS de Guayaquil, es un periodista con 26 años en el oficio, y debido a su experiencia fue respaldado por miles de seguidores en Ecuador. Durante la transmisión, Carlos Jurio pidió perdón por no haber informado de manera serena.

Recientemente, el gobierno ecuatoriano ha reconocido que el sistema sanitario de su país ha colapsado. Ante ello, han indicado que las Fuerzas Armadas recogerán los cadáveres para ser puestos en un cementerio humanitario recién instalado.

La reciente difusión de videos en las redes sociales en el que se muestran varios cadáveres en las calles de Guayaquil, Ecuador, ha generado preocupación en el país y en el ámbito internacional.

El diario El Universo reveló este martes que la Policía ecuatoriana maneja un listado con 450 cuerpos que deberá ser retirados de sus viviendas.

“No hay cifras oficiales sobre cuántas personas han fallecido y sus cuerpos no han sido retirados, tampoco sobre los levantamientos ejecutados. No obstante, según un listado que tiene la Policía para acudir a los levantamientos y al que pudo acceder este Diario, este martes estaban registrados casi 450 cuerpos en lista de espera para ser retirados de las viviendas”, señaló dicho medio.