Allisson Lozz no quiere saber nada de su pasado como actriz y afirma que “fue lo peor que le pasó en su vida” | VIDEO

Allisson Lozz fue una de las actrices más populares de Televisa, pero a los 17 años, decidió retirarse de la actuación y abandonar por completo su carrera que estaba en pleno auge. ¿Por qué la joven tomó esa decisión y hasta hora no puede dejar ese pasado atrás?

Lozz, quien actualmente tiene 29 años, saltó a la fama en 2002 al participar del reality de show infantil “Código F.A.M.A.”, pese a que no ganó, sí tuvo la posibilidad de formar parte de la telenovela infantil “Alegrijes y Rebujos” en el 2003. Al año siguiente, obtuvo su primer papel protagónico en la telenovela “Misión SOS”, junto a Diego Boneta, el actor que interpretó a Luis Miguel en su serie.

Posteriormente, en el 2005 se integró a la segunda temporada de la telenovela Rebelde y en el 2007, con solo 15 años, protagonizó “Al diablo con los guapos” junto a Eugenio Siller y Altaír Jarabo. En 2008 tuvo el papel principal con Sebastián Zurita, en “El nombre del amor”.

Tras varios años consecutivos de éxitos y papeles protagónicos, la actriz Allisson Lozz, quien vive actualmente alejada de las cámaras y los sets de grabación, decidió cambiarse el nombre para que sus seguidores no la puedan reconocer, dejando en claro que no quiere saber nada de su pasado ni de la fama.

La actriz, cuyo nombre original es Allisson Marián Lozano Núñez, se casó en el 2011, a los 19 años, con Eliu Gutiérrez y por ello decidió adoptar el apellido de su esposo. “(Lozz) es el apellido con el que nací de mi papá, pero en México y en Estados Unidos se usa mucho que cuando te casas usas el apellido de tu esposo y la verdad para evitar que me reconocieran en muchos lugares yo preferí adoptarlo en sí para todo y me encanta”, comentó.

Desde hace algún tiempo ella integra a los Testigos de Jehová y se encuentra muy enfocada en pasar tiempo en familia junto a sus dos pequeñas, además de su trabajo como emprendedora de una marca conocida de cosméticos, por ello es que siempre ha pedido a sus seguidores que la respeten y no le pidan tomarse fotos.

Pero hace unos días, la recordada actriz rompió en llanto en su cuenta de Instagram. A través de un video que publicó, la joven volvió a pedir a sus seguidores que si la ven en la calle no le pidan fotos, ya que ya no es una persona pública desde hace años y quiere dejar todo ese pasado atrás. “Les digo con todo cariño, si me ves en la calle no me pidas una foto. Yo no quiero volver a ser artista, es de lo peor que me ha pasado en mi vida y no quiero volver a serlo”, dijo la actriz bastante mortificada.

"Cuando estamos en pleno evento y se acercan a querer una foto y a querer platicar de mi vida pasada y todavía me dicen: 'Yo te sigo en tus redes sociales'. Entonces es como que 'ok, si me sigues sabes que me lastima, sabes que me lastima recordar mi pasado y me lo estás recordando y todavía si te digo me tomo la foto al final porque estoy poniendo atención al programa te enojas'. Entonces eso no está bien”, explicó la exintegrante de Televisa.

Hace un tiempo, la exactriz dejó entrever que la habría explotado porque ganaba poco y para ella todo era muy complicado, ya que tenía que “mantener” a su familia. “No tenía dinero para comprar mis vestidos de noche para los eventos y no iba”, comentó. También reveló que las telenovelas infantiles eran excesivas y que por eso cerró Televisa niños, pero que esas cosas no le importaba a los productores ni a sus padres.

Si bien señaló que no sufrió de abuso sexual porque su manager siempre la protegió, sí confirmó que la “citaban para que fuera sola”, pero su representante era quien les ponía un alto. “Realmente la novela que disfruté fue ‘Al diablo con los guapos’ porque la producción era más noble. Los actores me hablaban como una hermanita. Las jornadas eran muy muy pesadas, me ponían psicóloga”, comentó la exactriz.