Guillermo Dávila llegó hasta la Reniec para inscribir a Vasco como su hijo, pero el joven nunca apareció

Como sabemos hace unas semanas Guillermo Dávila utilizó sus redes sociales para revelar a través de un video que es padre del joven peruano Vasco Madueño, después de someterse a una prueba de ADN luego de más de 17 años.

“Luego de muchos años de negociaciones truncadas en las que yo siempre quise llevar a buen término todo esto, no solamente dependía de mi voluntad, sino de la voluntad de quien tenía la tutela de Vasco. Recientemente esto se ha podido concretar con la llegada a la mayoría de edad de Vasco”, comentó en un inició.

También reveló que desea mejorar la relación que tiene con Vasco, pues como sabemos en constantes ocasiones el joven peruano habló mal de su padre por no haberlo reconocido todo este tiempo, y recuperar el tiempo perdido. “Nunca es tarde cuando la dicha es buena, dicen por ahí. Nunca es tarde para recuperar el tiempo perdido. Hoy voy a entrar en una situación de armonía y no de conflictos, polémicas o insultos que yo he visto por alguno de los medios porque ahora sé que nunca vinieron de Vasco”.

Tras estas declaraciones el cantante venezolano decidió aprovechar su estadía en Lima para acercarse a una de las agencias de Reniec en el callao y así inscribir legalmente a Vasco Madueño como su hijo.

Tras varias horas de espera, el joven peruano nunca llegó a la cita, y Guillermo Dávila decidió retirarse de la agencia. Algunas personas que se encontraron ahí indicaron que el cantante venezolano se encontraba nervioso e impaciente al no ver llegar a su hijo.

Aunque no se saben los motivos de porque Vasco nunca apareció en la agencia de la Reniec, se supo que el cantante venezolano programó otra cita para que el joven peruano pueda obtener los documento donde lleva su apellido.

Vasco ha estado muy activo en sus redes sociales, pero no se ha referido sobre su padre en ningún momento, pues prefirió compartir algunas historias en su cuenta de Instagram es sobre su visita a una tienda de café.