Orgasmo femenino: 5 beneficios respaldados por la ciencia

En el marco del ‘Día Internacional del Orgasmo Femenino’, celebrado en agosto; Flavia Becker, especialista en enfoque de género, explica los 5 principales beneficios que aporta a nuestro cuerpo, respaldados por la ciencia.

Pero antes, ¿cómo surge el ‘Día del Orgasmo Femenino’?

Esta fecha nace a raíz de que el concejal de Esperantina (Brasil), Jose Arimateria Dantas Lacerda, decretara una ley en 2006 para defender el placer sexual en las mujeres. Desde que este proyecto fue promovido, muchos países se sumaron a la iniciativa.

Y es que hablar de temas de sexualidad y placer en nuestro país todavía resulta ser tabú porque lo asocian con un acto impuro. Sin embargo, poco a poco se vienen desarrollando acciones para acabar con los mitos.

¿Cuáles son los beneficios?

• Ayuda a la salud mental: Al liberar las hormonas de endorfina y oxitocina, ayuda a generar al cuerpo una sensación de optimismo, autoestima y confianza con uno mismo.

• Mejora las horas de sueño: Al momento de tener un orgasmo, se liberan endorfinas, brindándote una mejor capacidad de sueño.

• Elimina el estrés: Cuando se llega al clímax, el cuerpo libera las hormonas de oxitocina, endorfina, entre otras, brindando bienestar y relajando el sistema nervioso, disminuyendo los niveles de ansiedad o estrés.

• Mejora el sistema inmunológico: Los orgasmos estimulan el citado sistema, aumentando en un 30 % los anticuerpos, disminuyendo las probabilidades de agarrar alguna infección o gripe.

• Mantiene tu cerebro sano: Un estudio de Rutger University, confirmó que, al tener un orgasmo, le estás concediendo una mayor oxigenación y aumenta el flujo de sangre al cerebro.

Explorar la sexualidad

Flavia Becker recomendó a las mujeres que se animen a explorar su sexualidad, que sean creativas y experimenten este beneficio, aportando factores positivos en su salud, sin temor de ser juzgadas por la sociedad.

Señales del orgasmo

De otro lado, el especialista en Sexualidad y Salud Reproductiva de Apropo, Emerson Yancul, precisa que, en el caso de los hombres, el orgasmo se hace evidente ya que se presenta la eyaculación, sin embargo, en las mujeres -debido a la falta de visibilidad- suele ser ignorado durante la relación sexual.

A ello se suman algunos elementos socio-culturales que desencadenaron la creencia o el mito de que el placer durante este acto es propio de los varones y que la mujer cumple un papel secundario.

“Incluso muchas suelen fingir un orgasmo para hacerle creer a la pareja que son buenos amantes. Así ignoran la importancia y beneficios que esta sensación les puede producir, como pueden ser: disminuir los niveles de estrés, favorecer el sueño, mejorar el flujo sanguíneo, entre otros”, agregó Yancul.

Respecto a las mujeres, detalla que muchas pueden ser multiorgásmicas, es decir, pueden tener un orgasmo después de otro sin pasar por un período de espera como en el caso de los hombres.

¿Cómo alcanzar el máximo placer?

Alcanzar el orgasmo dependerá de que exista la estimulación, el deseo y la excitación sexual correcta.

El orgasmo puede alcanzarse no solo por la penetración, también puede darse por la estimulación de la parte visible del clítoris, estimulación anal e incluso estimulando ciertas zonas erógenas como los pezones.

Anota el experto que lo importante es reconocer que todas las personas podemos experimentar placer en nuestras relaciones sexuales, por lo tanto, el orgasmo femenino es algo que necesita mayor visibilidad.

“Se tiene la idea de que solo con la penetración se puede alcanzar el mismo, sin embargo, esto no es así, existen prácticas sexuales no penetrativas que pueden permitir alcanzar el orgasmo”, aclaró.

Un error común durante las relaciones sexuales

Para Emerson Yancul, hay una idea errónea que busca encasillar a todas las mujeres en un esquema o patrón al momento de la relación sexual, es decir, es un error pensar que todas las personas pueden reaccionar de la misma manera a diversos estímulos.

“Durante el acto sexual, no hay nada malo en preguntar si se está disfrutando o no de una práctica específica, eso sí, se debe consultar siempre con respeto y confianza qué cosas gustan más, cuáles menos, para poco a poco ir conociendo aquellos elementos que dan mayor placer, las zonas erógenas de la pareja y en definitiva tener relaciones sexuales que sean placenteros para ambos”, sostuvo.

Con todo ello, ¿cómo saber si la mujer no está disfrutando del acto sexual o no alcanza el orgasmo? El punto capital es conocerlo por medio de una conversación en la que exista el respeto mutuo y la comprensión.

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