Admisión 2022: UNI escogió a empresa denunciada por plagio e irregularidades en el sistema

El año 2022 representa una nueva oportunidad para miles de estudiantes quienes se presentarán a los respectivos exámenes de admisión que permiten las universidades públicas como las privadas.

Una de las entidades más demandadas es la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), sin embargo, esta casa de estudios se encuentra en el ojo de la tormenta tras una polémica decisión.

Según el portal Sudaca, la UNI ha escogido a la empresa Seidor Technologies para que sea la encargada de supervisar los exámenes virtuales en el marco del próximo procedimiento de admisión 2022.

Empero, esta designación ha causado sorpresa. Seidor Technologies tiene una amplia experiencia en el rubro, pero no posee una imagen positiva.

En julio de 2020, la Universidad Nacional Mayor de San Marcos la contrató para que sea la encargada de supervisar sus evaluaciones virtuales durante un año. No obstante, esa temporada terminó con denuncias de todo tipo.

Desde capturas de pantalla, en donde postulantes compartían las respuestas, hasta miles de estudiantes que no podían ingresar al sistema.

Pese a este grave antecedente, la Universidad Nacional de Ingeniería decidió darle la buena pro a Seidor Technologies el pasado 13 de enero. Sudaca afirma que el proceso de contratación estuvo lleno de irregularidades, así como cambios tardíos que han despertado sospechas.

Cabe señalar que, durante el proceso de contratación, Seidor Technologies ofreció a la UNI el mismo sistema que se empleó con la Universidad Mayor de San Marcos. La denuncia de este caso ya está en manos de la Contraloría General de la República.

Las denuncias contra Seidor Technologies

Seidor Technologies tiene presencia en 32 países del mundo y en el Perú ha brindado servicios a diversas casas universitarias. Entre sus principales clientes destacan la Universidad Cayetano Heredia, la UNI y la San Marcos.

A la 'Decana de América', le brindó el servicio de “servicio de monitoreo de actividades y seguridad informática en la aplicación de exámenes virtuales” desde el 15 de julio de 2020 hasta la misma fecha del año siguiente. Por esta labor, recibió un pago de 575 mil 422.30 soles, de acuerdo al portal del OSCE.

Durante ese periodo, San Marcos realizó el 2 y 3 de octubre de 2020 el primer examen de admisión virtual. La evaluación terminó por convertirse en un martirio para los postulantes. La plataforma que se utilizó para el examen se llama Smowl.

“El examen de admisión se había filtrado. Hubo capturas del programa Discord [una red social] donde habían transmitido el examen. También mensajes de WhatsApps donde se pedían las claves [de las respuestas]. Además, denuncias de alumnos que entraron sin cámara, algo que las autoridades dijeron que no estaría permitido”, señala Alejandra Vela, una de las postulantes al examen fallido de San Marcos.

“En mi caso me dejaron en la sala de espera, aguardando que el anfitrión me dé acceso, a pesar de que ingresé a tiempo. Como parte del procedimiento, debías ingresar a una especie de intranet y luego a un Google Meet. No fui el único caso”, explicó Esteban Godofredo, otro expostulante.

¿Cómo ganó la licitación?

Sudaca reveló que fueron dos empresas las que se presentaron al concurso público que inició la Oficina Central de Admisión (OCAD) de la UNI: Seidor y Cipli Research Center SAC.

La primera hizo una oferta de un millón 35 mil 961.94 soles, mientras que la segunda presentó su orden de pago a un millón 62 mil 720 soles. Luego de haberse analizado a ambas, se decidió por Cipli Research Center SAC.

Sin embargo, el pasado 28 de agosto de 2021, el Comité de Selección de la UNI declaró desierto este proceso aduciendo falta de presupuesto. “Esta dependencia no cuenta con la disponibilidad presupuestal para cubrir el excedente”, se lee en el acta. La diferencia entre ambos servicios se establecía en 80 mil soles.

Pero, según la Ley de Contrataciones del Estado, un proceso queda desierto cuando no se reciben ofertas o ninguna es válida. Según el abogado Cristian Castillo, especialista en la materia, el área encargada de la contratación pudo negociar con el ganador, en este caso, Cipli Research Center SAC.

"Normalmente lo que sucede es que le mandan una carta o correo al postor ganador diciéndole que el presupuesto alcanza hasta cierta cantidad y piden que se rebaje el precio. Es decisión del postor, en este caso Cipli, si acepta o no", señaló.

Eso nunca ocurrió. "Nunca se nos acercaron. Si lo hubieran hecho, hubiésemos aceptado", respondió Lester Vargas, directivo de Cipli, a Sudaca. Lo que hizo la UNI fue reiniciar el proceso, figura de adjudicación simplificada.

Convocó a las empresas nuevamente para el 22 de diciembre de 2021, pero ocurre una grave irregularidad: UNI envió un correo especificando el sistema que deseaba utilizar (Smowl y Smowl+).

"Yo no puedo lanzar una convocatoria para carros diciendo que deben ser Toyota. Eso sí sería irregular", refirió Cristian Castillo. Seidor era la única empresa que utiliza el sistema Smowl y Smowl+, la de Cipli es FractalUp.

Cipli pidió explicaciones a las autoridades de la UNI, quienes respondieron mediante una carta en donde señalaron que se trataba de "un error". Dicho y hecho, la entidad envió otra versión de pedido y allí no aparecía el nombre de Smowl.

Sin embargo, en el nuevo proceso la UNI realizó algunos llamativos cambios. Inicialmente, el pedido era para 58 mil 400 cuentas online y estableció su presupuesto en 980 mil 536 soles. Pero para la adjudicación simplificada, la cantidad de cuentas ascendió a 90 mil. Lo lógico hubiese sido que, al crecer el pedido, se aumente el presupuesto, pero esto decreció a 955 mil 800 soles.

La oferta de ambas empresas también variaron: Seidor bajó sus pretensiones a 946 mil 132.31 soles, mientras que Cipli, viendo que el servicio había aumentado, presentó su oferta en un millón 285 mil 020 soles.

Fue así que la UNI, el pasado 13 de enero de 2022, le entregó la buena pro a la compañía Seidor, empresa que protagonizó el accidentado exámen de admisión de la San Marcos en el año 2020.

Sudaca se contactó con la UNI y en ella hace una particular revelación: recibieron tres cotizaciones, pese a que en el cuadro de supervisión solo se comprenden a dos.

“Dicho monto es el resultado de las actuaciones preparatorias, esto es, solicitar a los potenciales proveedores sus respectivas cotizaciones a efectos de conocer el monto estimado para el servicio a contratar. Prueba de ello, es que se obtuvo tres cotizaciones”, refiere.

Finalmente, el presidente de la Asociación de Centros de la Universidad Nacional de Ingeniería (ACUNI), David Ramos, máximo órgano estudiantil de la universidad, la medida adoptada por UNI no es una mirada solo para el examen de admisión.

“Nosotros como estudiantes hemos exigido un examen presencial. Se logró, pero no podemos ser ingenuos. Por x razones en marzo podría darse una cuarta ola y las restricciones serían importantes. Obviamente esto [el servicio contratado] no está dirigido solo al proceso de admisión”, detalla.

Quedará ver que ocurre en el examen de admisión de la UNI 2022, esperando que no se repitan los escándalos suscitados con San Marcos.

• Universidad Nacional de Ingeniería (UNI)