Sal de la rutina y prueba estas 5 poses en la ducha
Únete al canal de Whatsapp de WapaSal de tu zona de confort, prueba otros lugares parar encender la llama de la pasión en tu relación de pareja. Si bien es cierto cuando hablamos de poses sexuales siempre pensamos en el misionero, pero, así como hay una gran variedad de posturas también existen otros lugares donde las puedes hacer.
No te límites a la cama, el sillón o donde ya lo hayas hecho, por ejemplo, la ducha también es un lugar perfecto para innovar con la pareja.
Así que, si deseas probar junto a tu pareja un lugar nuevo donde tener relaciones sexuales te dejamos algunas poses sexuales que puedes practicar en ese lugar:
Sexo en la ducha: arrodillados
Aquí están frente a frente y no necesitas tener mucho equilibrio por lo que estarán seguros. La pierna de él debe estar entre las tuyas y tus manos tienen que estar libres para que puedas dar rienda suelta a tu imaginación. Los besos y abrazos en esta pose son importantes.
Sexo en la ducha: contra la pared
Esta pose inicia con tu espalda contra la pared y las piernas rodeando su cintura, mientras él te agarra por las caderas o por el trasero, el movimiento está en base a lo que desees hacer. Eso sí, en esta postura la fuerza la ejerce él, así que déjate llevar.
Sexo en la ducha: cruzados
Si tu ducha es pequeña pues no hay problema, hay que adaptarse a la situación, pero ¡ojo! Se trata de una pose solo para personas que son algo flexibles. Eso sí, la penetración será más profunda y en esta pose tendrás más cabida para besos apasionado. Si la ducha es poco espaciosa puedes probar en otros espacios de tu casa, así como otras posturas del kamasutra.
Sexo en la ducha: sentados
Para empezar, necesitas una silla o taburete donde él pueda sentarse, a partir de aquí es más simple, tú te sientas sobre él y comienza el movimiento. En realidad, esta postura puede realizarse en cualquier asiento, pero como para probar puedes hacerlo en la ducha. ¿Tienes otra idea?
Sexo en la ducha: como en las películas
Aquí solo necesitas caricias, besos y abrazos. Te colocas mirando hacia la pared para que tu pareja pueda acariciarte por detrás no solo con sus manos y cuerpo, sino también con su miembro. Así que déjate llevar por el momento.