¿Por qué jamás se debe afilar un cuchillo con otro en la cocina?

Por qué jamás debes afilar un cuchillo con otro cuchillo | En los hogares peruanos se tiende a aplicar tips de cocina fáciles; sin embargo, estos no suelen ser muy seguros y más aún cuando pueden generarte algún corte.

Es realmente frustrante cuando en la cocina tenemos que lidiar con cuchillos que no cortan adecuadamente. Esto no solo nos hace perder tiempo y precisión, sino que también representa un riesgo, ya que los cuchillos desafilados pueden resbalar y causar cortes accidentales. La falta de filo en un cuchillo nos obliga a aplicar más fuerza al cortar, lo que aumenta la probabilidad de accidentes.

En este artículo, te proporcionaremos soluciones para realizar un mantenimiento adecuado y mantener tus cuchillos afilados. Para ello, puedes optar por herramientas profesionales como piedras de afilar o afiladores manuales de alta calidad que son adecuados para uso doméstico. Estas herramientas te permitirán mantener tus cuchillos en óptimas condiciones de corte.

Es importante tener en cuenta que nunca debes intentar afilar tus cuchillos rozando el canto de un cuchillo con el filo de otro. Esta práctica no solo podría dañar el filo de los cuchillos, sino que también representa un riesgo de cortes accidentales. Además, este método no mejorará la calidad del corte de tus cuchillos.

En lugar de hacerlo de esta manera, es recomendable utilizar herramientas de afilado adecuadas, como piedras de afilar o afiladores manuales, que están diseñadas específicamente para mantener y mejorar el filo de los cuchillos de manera segura y efectiva.

Para restaurar el ángulo de afilado en casa, puedes optar por cualquiera de estas dos técnicas que te ofrecemos:

El método más sencillo implica el uso de afiladores manuales. Con esta técnica, puedes afilar tu cuchillo de cocina en menos de 5 minutos y devolverle el poder de corte que tenía cuando lo compraste. Solo necesitas deslizar la hoja del cuchillo a través de la abertura del afilador varias veces, primero en la zona de desgaste (coarse) y luego en la zona de pulido (fine). Y listo, tu cuchillo estará afilado y listo para usar.

Si buscas un afilado aún más profesional, puedes recurrir a las piedras de afilar. Estas piedras pueden proporcionar un afilado de mayor calidad y precisión que los afiladores manuales. El proceso implica pasar la hoja del cuchillo sobre la piedra, primero utilizando una con un grit bajo (como 300/400) para desgastar la hoja y nivelar el filo. Luego, pasas la hoja sobre una piedra con un grit más alto (como 1000) para darle un pulido final. Es importante repetir el proceso en ambos lados del cuchillo para lograr un afilado uniforme y óptimo.