Huancayo: familiares de víctima acusan a esposa e hija de planificar asesinato

Rosario Maribel Echevarría Guerrero (58) y Nikol Rosales Echevarría (19) son las principales sospechosas del asesinato de Tomás Máximo Rosales (55), quien fuera esposo y padre respectivamente.

"Ahorita nosotros nos sentimos muy mal. Que mi sobrina y su mamá le hayan hecho esto a mi hermano", expresó la hermana de Tomás, quien a su vez lamentó que su cuñada y sobrina estén implicada en este asunto.

Según reveló el hermano de la víctima, Fernando Rosales, el problema nace a causa de una infidelidad por parte de Rosario hacia Tomás. Las tensiones fueron en aumento hasta llegar a las instancias judiciales.

"Todo este pleito empezó desde que Rosario una vez le fue infiel. Pienso que era una relación tóxica, porque han tenido problemas en la que el juez dictaminó que se retirara de la casa. Por calumnia de esa mujer a mi hermano lo sacaron de su hogar", expresó a Domingo al Día.

Máximo Rosales se casó con Rosario Echevarría hace 30 años. Producto de este matrimonio nacieron dos hijas. Luego de haber realizado un gran esfuerzo, ambos lograron construir una casa de cuatro pisos en un terreno de 300 m2 en el Tambo.

Asimismo, ambos se dedicaban al alquiler de bienes: departamentos y un local de eventos. Las ganancias permitieron hacerse acreedor de un vehículo. También se señala que tenían otros ingresos.

Pese a tener esta acomodada vida, la relación entre Tomás y Rosario se fue desgastando hasta que hace cinco años decidieron separarse.

Según señalaron agentes de la Policía Nacional, Rosario había iniciado una relación con un ciudadano de nacionalidad venezolana. En respuesta, Tomás hizo lo propio.

La tesis de las autoridades enmarca en que los problemas se iniciaron cuando Rosario se enteró de que Tomás había embarazado a su nueva pareja. Allí se inició la disputa de los bienes.

"Lógicamente con la muerte de la víctima los legítimos herederos de acuerdo a la filiación conyugal es la esposa y los hijos", indicó el coronel PNP Víctor Revoredo, jefe de la división de Homicidios de la Dirincri.

El pasado 3 de enero, Máximo Rosales se dirigió a su casa junto a su abogada para continuar con el proceso judicial que había iniciado en contra de su exesposa Rosario Echevarría. Lo que desconocía el hombre era que dos sujetos lo habían estado siguiendo en una motocicleta y de cinco disparos en la cabeza acabaron con su vida.

“Cuyos ocupantes eran dos ciudadanos de nacionalidad venezolana, siendo uno de ellos el ejecutor, el gatillero que desciende de este vehículo menor y efectúa cinco disparos con arma de fuego que impactan en la víctima”, agregó el coronel PNP Víctor Revoredo.

La familia de Tomás señaló que Rosario lo amenazaba constantemente. "Siempre quería botarlo de la casa como sea y quería quedarse con todo. Máximo ese día se encontraba con su abogada que le daba las noticias que ya tenía el proceso casi ganado al 100% para que pidiera el divorcio y la división de los bienes al 50%".

Además de Rosario Echevarría y su hija Nikol Rosales, identificó a los presuntos responsables del crimen. Se tratarían de Josue Alejandro Quinto Zarate y Willnel Luis Olivo Garrido, ambos de la banda criminal ‘Los chamos de Marochini’. Habrían huido tras cometer el delito.