¿Necesitas consumir vitamina C? Estas son las recetas perfectas para ti
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Las vitaminas y nutrientes son muy necesarios para el buen funcionamiento del organismo y permite tener el sistema inmunológico se encuentre en perfecto estado para prevenir futuras enfermedades.
Es así que, si luego de una visita al doctor, te ha recomendado agregar a tu dieta vitamina C, y no quieres comer solo fruta. En el siguiente espacio te dejamos 2 recetas que se convertirán en tu mejor opción.
Cabe mencionar que, la vitamina C es un potente antioxidante y que participa en la formación de colágeno para la piel, por lo que también ayuda a mantener las articulaciones, la densidad ósea y facilita la cicatrización.
Recetas ricas en vitamina C
- Wok de verduras
Ingredientes
- 1 pimiento rojo.
- 2 zanahorias.
- 1 berenjena.
- Salsa de soja.
- 1 calabacín.
- 1/2 cebolla.
- 1 pimiento verde.
Preparación
Para iniciar, lava cuidadosamente todos los vegetales y cortarlos en tiras finas. Luego, cuando lo tengas listo añade un chorro de aceite en el wok y añade, en primer lugar, la cebolla y la zanahoria y cuando te parezca que están doradas, añade el resto de las verduras. Debes saltearlo todo durante un par de minutos.
Finalmente, rectifica el punto de sal, añade un poco de salsa de soja para aliñar esta receta y listo. ¡Delicioso y nutritivo!
- Tortilla de espinacas y frijoles blancos
Ingredientes
- 300 gramos de espinacas frescas
- 200 gramos de frijoles blancos cocidas
- 2 huevos
- Sal
- Pimienta
Preparación
Lo primero que debes hacer es poner a hervir las espinacas. Para ello, pon un poco de agua en una olla y cuando empiece a hervir añade las espinacas. Al cabo de 10 minutos las retiras del fuego y las escurres presionando fuerte para extraer el exceso de agua.
Los frijoles pueden estar ya cocidas, pero si prefieres que estén secas, deberás dejarlas en remojo el día anterior y después hervirlas. Una vez tengas las judías y las espinacas listas, tendrás que batir los huevos añadiendo ambos ingredientes a la mezcla. Rectifica de sal y, si quieres, puedes añadir una pizca de pimienta.
Tienes que batir hasta que el huevo esté espumoso y los ingredientes se hayan mezclado. Después, pon un poco de aceite en una sartén y cuando esté caliente vierte la mezcla. Deja que se haga por un lado y después dale la vuelta a la tortilla para que se acabe de hacer.