¡60 y 20! Tinder los unió, se llevan 40 años de diferencia y ahora luchan contra los prejuicios

¿Para el amor no hay edad? Con casi 40 años de diferencia, Willow, de 23 y David, de 62 años han formado una hermosa relación basada en el amor gracias a una aplicación de citas.

Fue a través de Tinder que la pareja se conoció y según reveló el hombre, fue amor a primera vista.

“No quería dejarme influenciar por nada externo, solo quería conocerlo como persona. Déjame ver si tú también me gustas, antes de dejar que cualquier factor externo me haga sentir de alguna manera”, señaló la joven. "Fue una conexión increíble" mencionó David.

Luego de su primer encuentro, tuvieron un intenso romance que los motivó a vivir juntos a los tres meses de noviazgo.

Por la prisa con la que iban cualquier pensaría que la relación estaría por llegar a su fin; sin embargo, todavía permanecen juntos y felizmente enamorados realizando múltiples viajes de lujo.

Juntos han asistido a ver desde los Backstreet Boys hasta pasar los fines de semana en las Bahamas. La pareja continúa muy unida, tanto que incluso se han animado a abrir una cuenta en TikTok donde muestran su relación.

No obstante, también han tenido que soportar las críticas de los internautas quienes no han pasado por alto la amplia diferencia de edades, teniendo el escrutinio de tildar de 'cazafortunas' a la joven o 'sugar daddy' al hombre.

"Ya no puedo leer comentarios porque me tomo esas cosas como algo personal", expresó David.

A pesar de las ofensas y 'hate' que reciben diariamente, la familia y personas cercanas a la pareja aceptaron mucho más su relación.

El promotor inmobiliario incluso resaltó que "su madre dice: 'Estoy convencida de que se conocieron en vidas anteriores... Nunca había visto a mi hija más feliz'".

Y es que su felicidad desborda cualquier red social, ya que la modelo siempre ha preferido salir con hombres mayores y disfrutar de los pequeños gestos como sacar su silla en un restaurante.

“Definitivamente he salido con hombres mayores antes”, contó, y añadió: “Ellos ya aprendieron y no tenés que cuidarlos. Son corteses. Saben cómo tratar a una dama”.