Rosángela Espinoza se somete a una metamorfosis capilar luciendo imponente cambio de look

Rosángela Espinoza es una mujer que no teme hacer cambios en su vida pues con el tiempo ha demostrado tener una personalidad atrevida e intrépida capaz de tomar arriesgadas decisiones. La chica reality suele reflejar una picardía innata gracias a la selecta fusión de prendas de su guardarropa; no obstante, esta vez llamó la atención de nuestro radar fashionista no precisamente por algún outfit sino por su novedoso cambio de look.

La integrante de ‘Esto es guerra’ se animó a darle un giro a su habitual imagen apostando por un favorecedor tinte que le dio mayor brillo y realce a su rostro. Una tonalidad conocida que le otorgó más luz a su mirada dándole un nuevo look mucho más brillante y armonioso.

En Instagram, Rosángela Espinoza compartió una serie de instantáneas en donde posó con algarabía y dicha con su nuevo styling capilar que demostró la magia y hermosura de los cabellos escarlatas. Una tendencia capilar a la que sucumbió la modelo peruana.

En este caso la popular ‘chica selfie’ dejó atrás su tono de cabello natural para someterse a los designios de las melenas ginger, un estilo capilar que le otorga mayor calidez al rostro gracias a la tonalidad sumamente sublime y evocadora.

No cabe duda que Rosángela Espinoza cayó rendida ante esta metamorfosis capilar gracias a los múltiples beneficios que le ofreció este poderoso cambio de look que tuvo al color rojo como principal protagonista de su look. En el plano internacional diversas celebs han apostado por esta fiebre rojiza y la chica selfie no perdió la ocasión de renovar completamente su look.

Una apuesta provocadora y fascinante cuando se quiere salir de la línea de los tonos más clásicos como el rubio y el marrón oscuro. Su estilismo puso de manifiesto su decisión de apostar hacia la mágica tendencia de melenas en tonos rojos y jengibre para conseguir un divertido y versátil look.

"El cabello rojo es el color de la temporada -hay un montón de chicas que quieren un cambio ante el tono rubio y no necesariamente quieren caer en el clásico tono marrón, o en los tonos demasiado oscuros. Incluso si lo hacen, se atreven a agregar un poco de diversión y juegan con los tonos entre rubios y morenos. Lo bueno de los rojos es que puedes cambiar el tono, así que puedes pasar de un rojo cereza a uno cobre rojizo, sin problemas", comentan desde Vogue.