Carboxiterapia facial: ¿Sabías que el dióxido de carbono ayuda a eliminar las ojeras?

El dióxido de carbono en pequeñas cantidades tiene múltiples beneficios para nuestra piel y uno de los tratamientos que se encarga de emplearlo para conseguir resultados rejuvenecedores es la carboxiterapia facial. Una técnica que introduce el CO2 para oxigenar el tejido del rostro favoreciendo la eliminación de arrugas y ojeras.

Este es un tratamiento médico-estético no invasivo ni quirúrgico que a través de microinyecciones se aplica el dióxido de carbono medicinal debajo de la piel. Este gas que producimos los humanos, animales y plantas está en nuestro organismo por lo que al introducirlo al cuerpo conseguimos que los vasos sanguíneos se dilaten generando la oxigenación del tejido.

Asimismo, se desechan varias toxinas por medio del sistema linfático logrando que la piel tenga un tono más uniforme y menos cansado. Y es que la carboxiterapia facial ayuda a que se regenere la producción de colágeno logrando que tenga más elasticidad y firmeza las zonas del rostro, ojeras, escote y cuello.

A continuación, te mostramos algunos de los beneficios que obtiene la piel al usar la carboxiterapia facial.

-Mejorar la circulación de la piel y la formación de fibras elásticas

-Reafirmar el tono de la piel

-Devolverle el esplendor natural a la dermis

-Tratar las ojeras y bolsas de ojos

Cabe precisar que este tratamiento es un procedimiento sencillo que no requiere cirugía y genera molestias mínimas. Es preciso acudir a un centro estético especializado que controle la dosis exacta, el tiempo y temperatura que se focalizará en una zona específica acorde a cada tratamiento y paciente. Según el portal UnComo se utilizada una aguja muy fina de 0,3 mm de diámetro y luego se suele realizar un suave masaje en la zona para que el CO2 se distribuya.

Además, antes de someterse a un tratamiento es preciso saber los efectos secundarios y las contraindicaciones para sentirnos completamente seguros al momento de realizar este tipo de acción en la piel. Algunas de ellas según el portal UnComo son:

-Si tienes cualquier enfermedad congénita del corazón

-Si has sufrido un infarto, tienes una angina de pecho, insuficiencia cardíaca muy grave o una enfermedad cardíaca congestiva

-Si tienes la presión arterial alta

-Si has sufrido una embolia pulmonar o tienes trombosis aguda

-Si has tenido un accidente cerebrovascular reciente o sufres de alguna enfermedad de este mismo tipo

-Las personas que tienden a retener dióxido de carbono sufren trastornos de apnea del sueño o enfermedades pulmonares graves o crónicas. En estos casos no es conveniente usar este tipo de terapia

-Si estás en tratamiento con diálisis

-Si sufres ataques de epilepsia

-Si padeces: infecciones virales crónicas, infecciones cutáneas agudas o periodos de inflamación en zonas locales especificas

-Gangrena

-Las mujeres embarazadas o lactantes deben tener cuidado. En estos casos es recomendable consultar antes al médico de cabecera o ginecólogo que lleve el embarazo.

-Personas que tengan sangrado excesivo o hemofilia, así como quienes sufren de anemias muy fuertes, o cualquier enfermedad hemorrágica