“Era un monstruo de noche”: la esposa de Gabriel Donayre rompe su silencio por caso de violación

María Dolores Garzapio, madre de la menor de 16 años, quien fue ultrajada por su propio padrastro Gabriel Donayre Montesinos, hijo del excongresista Edwin Donayre Gotzch, rompió su silencio tras vivir junto a su hija uno de los episodios más amargos y dolorosos de sus vidas.

Como se recuerda, el pasado jueves 7 de octubre, el hijo del exparlamentario, se quitó la vida con una de sus prendas que ató a los barrotes, al interior de la carceleta del Poder Judicial. Gabriel Donayre (44), capitán de fragata de la Marina de Guerra, había sido detenido tras la denuncia de su esposa María Dolores  por presuntamente haber abusado de su hija adoptiva, de 16 años. Horas antes de quitarse la vida, el Poder Judicial había ordenado nueve meses de prisión preventiva por el delito contra la libertad sexual.

Aunque él negó las acusaciones al ser interrogado, la menor confirmó - en la cámara Gesell - los ataques sexuales de su padre adoptivo desde 2015, es decir, desde que tenía 10 años, y que este la golpeaba para que no lo denunciara.

La argentina María Dolores Gazpio, madre de la niña abusada sexualmente por su padre adoptivo, Gabriel Donayre Montesinos, se pronunció por las acusaciones de su expareja en el programa ‘Magaly TV La Firme’.

“Tenía una doble personalidad, era un monstruo de noche y se le activaban los instintos más primitivos y cerdos. De día era el excelente oficial, excelente profesional, padre ejemplar”, contó.

La mujer también reveló que, cuando convivía con Gabriel Donayre, este buscaba siempre quedarse solo con la menor para cometer su delito.

Aunque está muerto, la ciudadana argentina emprendió una batalla legal para demostrar la veracidad de la denuncia de su hija. Como se sabe, antes de autoeliminarse, Donayre Montesinos lo negó todo y dijo que su esposa inventó la acusación para quitarles la custodia de sus hijas y llevárselas a Argentina.

“Por más que este tipo se haya ahorcado, yo quiero demostrar hasta último momento la veracidad de la denuncia de mi hija. Quiero terminar con todas las instancias que requiere el sistema judicial peruano para que esta causa se cierre bien porque claro, muerto el perro, se acaba la rabia”, agregó.