VALERIA PIAZZA y la vez que CASI PIERDE LA VIDA: "Me querían cortar el pie, mi mamá paraba llorando"

Valeria Piazza estuvo en boca de todos tras contraer matrimonio con Pierre Cateriano. El evento contó con varios rostros conocidos del espectáculo.

De esta manera, la exMiss Perú ha demostrado que le va bien tanto en el amor como en lo laboral. La ‘influencer’ es una de las conductoras más importantes de América Televisión.

Sin embargo, no todo ha sido color de rosa para la modelo peruana. Hace un tiempo le detectaron una enfermedad poco común en nuestro país. La situación se complicó hasta el extremo que casi parte a la vida eterna.

La propia Valeria Piazza contó que de un momento a otro se sintió mal. En una madrugada sufrió un desmayo y su mamá la llevó inmediatamente a una clínica. Todo esto fue a fines del 2017.

En una entrevista con Jesús Alzamora, la conductora de televisión brindó detalles de lo que le sucedió.

“Desaparecí de todo casi seis meses. En Perú, como no tenía un diagnóstico, tuve 9 médicos y hasta me diagnosticaron infección al cerebro, dijeron que la infección se había generalizado por todo el cuerpo, incluso le dijeron a mi mamá que me tenían que cortar el pie, porque al no tener mucha circulación en la sangre, los pies se me pusieron negros. Mi mamá paraba llorando”, señaló.

Agregó: "Pensaba que me quedaba seis o siete días. Cuando aparecieron nueve doctores en mi cuarto, todos preocupados, yo escuchaba las conversaciones y decía ‘no, Dios, tengo que despedirme’, quería salir y ver a la gente que quería”.

Valeria Piazza contó que en el 2018 le dijeron que padece del síndrome de Behcet, una rara enfermedad que no tiene cura y que causa inflamación en los vasos sanguíneos.

“Gracias a Dios seguí un tratamiento en Barcelona y mejoré dos años después... He aprendido a valorar mucho la vida y las oportunidades que aparecen”, comentó al diario El Popular.

La exMiss Perú continuó explicando sobre su tratamiento. “La enfermedad no se cura. En Barcelona, comencé con el tratamiento biológico, que cada dos semanas me pongo unas inyecciones en la barriga y me va muy bien. De hecho, hay días que sí me levanto con dolores, me siento mal, todavía tengo los síntomas. Por ejemplo, hace tres días no podía dormir porque no me circula bien la sangre en los talones”, sostuvo.