A diferencia del descenso vaginal anormal, el flujo vaginal es algo totalmente normal. Antes que nada, debes saber que éstos son necesario para salud de la vagina y no debes preocuparte ni acomplejarte si tu ropa interior queda un poco manchada.
El flujo vaginal brinda lubricación vaginal. Gracias a ello, se evita infecciones ya que es un potente antibiótico natural. Asimismo, es algo esencial para poder disfrutar de las relaciones íntimas.
Sin embargo, sabemos que a veces puede ser un tanto incómodo, sobre todo si el olor es un poco fuerte. Por ello, Wapa.pe te sugiere realizar una consulta médica sobre qué tratamientos podrías llevar sin afectar el PH de tu vagina.
Luego de realizada la consulta, te contamos algunos remedios naturales y consejos que pueden ayudarte a completar el tratamiento:
- Vinagre de manzana o vinagre blanco: destruye las bacterias dañinas y hongos. Restaura el equilibrio del PH en la piel, en y alrededor de la vagina. También acabará con la quemazón y ardor.
Lave la vulva con una solución de 2 cucharadas de vinagre de manzana por 1 taza de agua dos veces al día para aliviar los síntomas.
- Hojas de cilantro: ricas en minerales y vitaminas esenciales. Propiedades antibacterianas, antifungicas, antiinflamatorias y antioxidantes.
Pon las hojas de cilantro en dos tazas de agua hirviendo y tapa la bebida para dejarla reposar por aproximadamente 20 minutos; posteriormente; procede a pasar la mezcla por un colador y bébela con moderación.
- Hojas de guayaba: propiedades antioxidantes, antibacterianas y antiinflamatorias. Combaten todo tipo de infecciones de forma eficaz.
Primero, pon el agua a hervir en una cazuela y añade las hojas de guayaba. Cuece durante 10 minutos y apaga el fuego. Por último, deja reposar 5 minutos, y luego bebe con moderación.
- Jabones suaves y agua tibia: Recuerda que la higiene correcta es la mejor manera de prevenir todo tipo de infecciones que generan malos olores. Mantén una higiene exhaustiva, sobre todo después de las relaciones de pareja o la micción. Ingresa AQUÍ para conocer más detalles.
Especialistas señalan que se debe tomar acciones inmediatas cuando el descenso tiene consistencia mucho más aguado o espeso. Cuando la coloración de la secreción es gris, verde, amarilla o marrón. Además, también se debe tener en cuenta el volumen, el aumento significativo e inesperado del flujo y el olor de tipo metálico o a pescado desagradable. Aprender a diferenciarlos será útil en el diagnóstico para acudir al médico y evitar que degenere en una infección vaginal.