Carta para no aferrarte a nadie

A continuación te presentamos una misiva titulada "Carta para no aferrarte a nadie". Recordemos que el tema del apego emocional existe y muchas personas han pasado por estas experiencias. Estamos seguras que muchas personas se sentirán identificadas. Esta largas líneas llegan gracias a Estrella Gonzáles, una blogguera que quiere compartir con todos estas viviencias.

Lee detenidamente esta carta:  

"Seamos sinceras, todas nos hemos aferrado alguna vez a ese chico que nos dijo que no, que nos ponía excusas y que nos trataba de la peor forma. Siempre preguntándonos: ¿Por qué nos pasa esto? ¿Por qué me trata así? ¿Por qué el amor tiene que doler? El amor no es dolor, no es rechazo; es todo lo contrario.

Seamos sinceras, si alguien no te invita a salir es porque no quiero hacerlo. Si no te llama, es porque no quiere llamarte. Si no te escribe, es porque no le nace. Nadie se queda sin batería todo el tiempo, nadie deja de ir al baño sin su celular o siempre está ocupado.

Seamos sinceras, si te trata como si no le importaras, pues no le importas. Si te deja con motivo o sin motivo es porque no quiere estar contigo. Si te traiciona, es porque realmente no le gustas lo suficiente ¿Por qué buscar razones para sentirte culpable? ¿Por qué te aferras tanto? ¿Por qué le pones tantas excusas?

Nos apegamos tanto que le creemos todos sus argumentos: “Le tengo miedo al compromiso”, “es que no estoy listo para formalizar”, “Me rompieron el corazón antes”, “Me gustas PERO”, “es que sí PERO…” PERO nada, si de verdad le gustases no habría “peros” de por medio. A todos, en algún momento, nos han roto el corazón, lo hemos tenido abatido pero eso no significa que nos complicaremos el mundo. No es que tenga el corazón roto o este confundido o necesite tiempo para pensar ¿Pensar en qué? ¿Si va a estar contigo o no? ¿Qué salen un día, la pasan bien pero de ahí desaparece un mes? No es que necesite un retiro espiritual, necesite meditar o pensar bien las cosas, seamos sinceras: ¡No quiere estar contigo!

Seamos sinceras, no necesitas demostrar a nadie que eres “una buena chica” para aguantar a alguien que no se decide por ti y que cada  día lo veas como un niño que no sabe que sabor de helado comer. Tampoco puedes vivir con la esperanza de que alguien puede cambiar mientras te hunde en la profunda depresión. No existen personas asustadas o confundidas, es simplemente que no quiere involucrarse contigo. Tampoco existen personas trágicamente afectadas por el pasado ni que necesitan ser rescatadas.

Recuerda que algunas personas te quieren en tu vida y otras no, solo es cuestión de que te des cuenta y que no pierdas más el tiempo.

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