Hay muchas razones para sentirnos amadas y sobre todo para querer cada parte de nuestro cuerpo. Es importante que sintamos cariño y deseos de cuidar nuestra tesoro más preciado; zona íntima.
Pues, cuando hablamos de "vagina" no solamente debemos pensar en el sexo, existe también otras cosas con las que podemos asociarla. A partir de este punto de nuestro cuerpo se puede generar la fecundación y el parto. Por eso, si algún día quieres convertirte en madre es mejor que desde ahora protejan bien esa zona.
Es una zona pequeña que permite el ingreso del miembro del hombre, nos da placer y genera muchas sensaciones en el cuerpo que, por supuesto, son totalmente placenteras y agradables.
Nuestra zona íntima nos hace volar y sentirnos deseadas. Es bonito cuando una mujer se quiere y acepta tal cual es ¡Ama a tu cuerpo para que otros lo hagan también.
Pues, claro que sí, a todos los hombres les gusta apreciar esta zona. Sucumben a los encantos que esta les de. A penas oyen su nombre, empiezan a sentir una electricidad por todo su cuerpo. Se derriten y no lo podemos negar.
Ellos se impactan más por lo que ven que por lo que escuchan. Así funciona su cerebro, ni modo. Si ellos ven que acaricias tu zona íntima también volarán inmediatamente. Sienten placer al segundo.