Muchas veces los padres pierden la calma ante el arranque de creatividad de los pequeños. Pero no grites ni reprendas. Explícale que ese no es el mejor lugar para pintar y que si desea, le puedes dar libros y hojas para colorear. Si prefieres, puedes comprarle todo tipo de artículos para pintar como plumones y crayolas fáciles de limpiar.
Existen productos para colorear que no pintan sobre ciertas superficies y así te evitas que malogre la pintura de las paredes.
Afortunadamente, hay soluciones caseras para quitar las manchas de crayola. Pruébalas primero en una pequeña parte, para ver si funciona, ya que algunas pinturas de pared son más fuertes que otras y si no tienes precaución puedes terminar dañando más la superficie.
Pídele ayuda a tu hijo así le vas explicando que no lo vuelva a hacer.
- Restregar suavemente un poco de pasta dental sobre la mancha. Dejar actuar durante unos minutos y retirar el producto con un trapo húmedo.
- Combina bicarbonato con un poco de agua hasta formar una pasta. Después, con la ayuda de una esponjita o escobilla, empieza a frotar sobre la mancha. Deja actuar unos minutos y retira con un trapo húmedo.
- Coloca un poco de crema de afeitar sobre la mancha. Luego, con una esponjita esparce con movimientos circulares. Saca la crema con un trapo limpio.
Existen muchos trucos para quitar esas manchas, pero quizá desees dejar esas pequeñas obras de arte para que tus hijos sepan lo orgullosos que estás de ellos.
