Charo Guadalupe al borde de las lágrimas al recordar cuando le salvó la vida Jefferson Farfán: "Lloré del susto"
La madre de Jefferson Farfán señaló que ese incidente la terminó marcando para toda su vida. "Lloré", exclamó.
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Charo Guadalupe, madre de Jefferson Farfán, se emocionó al borde de las lágrimas al contar una terrible experiencia que le tocó vivir junto al ex futbolista de Alianza Lima. Reveló que pudo haber terminado una tragedia.
Según su declaración en el programa Enfocados, la madre de la 'Foquita' señaló que un apagón los sorprendió en su domicilio ubicado en el distrito de Villa El Salvador. Debido a que se encontraba sola, decidió ir a la casa de su primo que estaba cerca del lugar.
No obstante, debido a la fuerte oscuridad, Charo Guadalupe no pudo advertir la presencia de huecos de aproximadamente un metro y medio de profundidad. De acuerdo con su versión, estos huecos eran utilizados por los pobladores como silos debido a que todavía no se contaba con agua ni alcantarillado.
"Salí con Jefferson. Tenía nueve meses. Fuimos donde mi primo José Antonio y como todo estaba oscuro, iba caminando cargado con mi hijo", comentó para luego detallar que fue lo que pasó tras caer a este hueco.
"En eso caigo a un hueco. Supuestamente allá son silos. La profunidad era de metro y medio", subrayó. Charo Guadalupe indicó que, debido a que se encontraba sola en medio de la oscuridad y con su hijo Jefferson de nueve meses, empezó a desesperarse. Así que tomó una radical decisión que pudo costarle la vida a su menor hijo, pero explicó que era lo único que podía hacer ya que no había otra posibilidad.
"Caí al hueco con mi hijo. Lo agarré, me paré y me desesperé. Dije que me puede pasar lo que sea, me puedo morir, pero no a mi hijo. Lo agarré y lo aventé hacia afuera para yo salir. Comencé a escalar para salir. Yo quería vivir, luchaba por mi hijo", subrayó.
Charo Guadalupe: "Esa anécdota me ha quedado marcada"
Siguiendo con su relato, Charo Gauadalupe señaló que logró salir del hueco, pero ya se le dificultaba encontrar a su hijo Jefferson ya que él habitualmente no lloraba. "Lo bueno de Jefferson es que cuando él se caía, no lloraba y ahí se quedaba. En ese rato, fue un problema porque todo estaba oscuro, para encontrarlo fue un dilema".
"Comencé a caminar y empecé a pisar despacito. Tenía miedo de pisarlo y hacerle daño a mi hijo. Hasta que le pisé el pie, sentí algo blando y dije acá está mi hijo. Y era Jefferson. Comencé a llorar porque dije pucha pudo haber caído en una piedra y hacerse daño", expresó.
Finalmente, dio un discurso que terminó conmoviendo a todos en el lugar, el cual destacó el sentimiento de madre. "Dije me puedo morir, pero mi hijo no. Estaba comenzando a vivir. Esa anécdota me ha quedado marcada. No salió en la película, pero debió de haber salido", concluyó.