Por diferentes razones algunas veces las mujeres optamos por depilarnos con cuchilla. De inmediato viene la pregunta ¿Es posible conseguir la depilación perfecta con esta opción ? Por supuesto que sí, para ello solo debes seguir los siguientes consejos.
Es importante que te exfolies de dos a tres veces por semana para eliminar de la superficie de la piel todas las células muertas y para que no se enquiste ningún pelito.
Antes de depilarte, date una ducha durante dos o tres minutos, para que así se suavice el vello.
Aplica un poco de espuma de rasurar (también vale una avellana de acondicionador o suavizante de pelo) y afeita en dirección contraria al nacimiento del vello. De esta forma, conseguimos que el pelo quede recto y así la cuchilla puede cortarlo desde la base.
Elige una maquinilla que incorpore, al menos, tres cuchillas en el cabezal (deberás cambiarla cada cinco ó diez afeitados).
Depílate con movimientos suaves y siempre en dirección contraria al nacimiento del pelo.
Afila con frecuencia el cabezal y, cuando la pases por la piel, evita presionar para así no irritar la dermis.