Joven de Apurímac dejó carrera de Derecho en la PUCP para estudiar la UNI

Saúl Ancco es un joven original de Abancay que en el 2019 llegó a la capital con la idea de estudiar en la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI). No obstante, llegó la pandemia de la COVID-19 y los exámenes de admisión se retrasaron, por ello, decidió optar por otra carrera e ingresó a la Pontifica Universidad Católica del Perú (PUCP). Pero se dio cuenta que el Derecho no estaba en su camino profesional, porque decidió intentar una vez más a la UNI, consiguiendo entrar a la carrera de Ingeniería Económica en 2022.

Saúl Ancco Monzón es de la región Apurímac, sus padres han trabajado toda su vida en construcción, lo que desarrolló en él el querer estudiar una carrera relacionada con eso. Terminó sus estudios de primaria y secundaria en el Colegio Nacional La Salle de su localidad. Al finalizar, vino a Lima para prepararse y buscar un cupo en la UNI, con interés al principio por la Ingeniería Civil.

Al inicio, Ancco estuvo aventurándose en distintos campos académicos para decidir qué carrera seguir, lo que lo llevó a inscribirse a Derecho en la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP). Pese a su decisión se dio cuenta de que no se sentía motivado con el área, pues en el fondo sentía que los suyo estaba en temas más técnicos y científicos.

"Me gustaba comunicarme con las personas, participar en debates, charlas y entrevistar. Por ello, decidí estudiar Derecho y me inscribí en la carrera en la Universidad Católica. Sin embargo, cuando me di cuenta de que había anunciado a todos que ingresaría a la universidad para estudiar Ingeniería Civil, me sentí mal, no me sentía tan bien en la Católica", contó durante una entrevista para el canal de YouTube de Modesto Montoya.

"Dije: 'Bueno, si ya ingresé a la Católica, lo intentaré nuevamente'. Así que en agosto intenté de nuevo e ingresé a la UNI a la carrera de Ingeniería Económica, que converge entre las matemáticas y las ciencias sociales", agregó.

Tras pasar un año de ardua preparación y lograr superar las interrupciones provocadas por la pandemia, Saúl entró a la UNI en el 2022 para la carrera de Ingeniería Económica. Tras pasar sus primeros ciclos, el joven indicó que fueron meses muy desafiantes, pero gratificantes, porque aprendió a sobre temas muy complejos que nunca había abordado en su preparación previa, como las derivadas en matemáticas.

"Mis expectativas han ido mejorando cada vez más, tenía cierto temor de ingresar a la universidad, preocupado por si no sería tan buena como las privadas, especialmente en temas de infraestructura y aulas virtuales. Sin embargo, una vez dentro, te das cuenta de que existen ciertos lugares muy modernos. (...). Realmente, no hay mucho que envidiar a las universidades privadas. Más bien, aquí, no pagamos una mensualidad, y en cuanto calidad-precio, la UNI es mejor que cualquier universidad", finalizó.