¿Cómo limpiar y lavar la vagina después de tener relaciones?
Una de las indicaciones que más se recomienda es no volver a usar la ropa interior usada previamente al acto sexual. Conoce el por qué.
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La higiene diaria en las partes íntimas son fundamentales para preservar una buena salud. De igual forma, es necesario conocer el procedimiento para realizar una correcta limpieza en la zona genital luego de un acto sexual.
El sexo es una actividad húmeda y desprolija: el semen, el sudor, el lubricante en algunos casos y los fluidos vaginales pueden dejar la zona íntima de la mujer completamente húmeda, y expuesta a algunas infecciones.
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Ante esta situación, Wapa.pe te cuenta cuál es la forma correcta de limpieza y lavado para prevenir enfermedades. Cabe mencionar que siempre seremos insistentes en que debes hacer uso de preservativos para evitar algún contagio de ETS.
¿Cómo limpiar y lavar la vagina después de tener relaciones sexuales?
1.- Orinar
Es necesario mencionar que es importante miccionar después de tener intimidad, según recomiendan varios especialistas. El flujo de orina ayuda a eliminar las bacterias de la uretra, y evita posibles infecciones.
2. Limpiar la humedad
Es una buena idea agarrar una toalla blanca y limpia o un poco de papel higiénico y limpiar el exceso de humedad en la vagina. Esto evitará que las bacterias y la levadura desarrollen candidiasis.
3. No jabones perfumados
Especialistas recomiendan no usar jabones perfumados o enjabonar demasiado. "La vagina, con sus secreciones naturales y su ambiente ácido", dijo Twogood, "se limpiará a sí misma. No es necesario hacer nada después del sexo para 'limpiarlo'".
4. Solo agua
Se puede lavar con agua corriente y jabón sin perfume o neutro, y luego secar completamente con una toalla limpia.
Otras recomendaciones
Recuerda que, para preservar la buena salud de tu vagina se recomienda evitar usar la ropa interior que se estaba utilizando previamente al acto sexual. Permanecer desnuda un rato ayuda a ventilar la zona y dejarla respirar, lo que disminuye el riesgo de una infección por levaduras o una fuerte picazón.