Los huevos yoni, llamados también huevos vaginales o huevos de obsidiana, son piedras talladas en forma de huevo que físicamente sirven para tonificar los músculos pélvicos, es decir, los músculos de la vagina. Pero además tiene un efecto a nivel energético: te ayuda a liberarte de las emociones producidas por experiencias sexuales negativas.
En el mundo de las terapias alternativas, el uso de los huevos yoni cada vez va ganando más seguidoras, ya que son muchas las mujeres que han sido víctimas de violencia sexual y que, como consecuencia de ello, tienen problemas para relacionarse positivamente con su cuerpo y su sexualidad.
La función principal de los huevos yoni es el fortalecimiento del suelo pélvico —conjunto de músculos responsables de sostener la vejiga, la uretra, el útero, la vagina y el recto—, que sirve para ayudar a controlar la incontinencia urinaria pero que además permite experimentar un mayor placer durante la penetración. También mejora la calidad e intensidad de tus orgasmos; aumenta la energía y el apetito sexual e incrementa la lubricación.
Su uso es recomendado en mujeres que están atravesando por cambios a nivel sexual como las que se encuentran experimentando la menopausia o las que acaban de dar a luz. En el caso de las mujeres menstruantes, los huevos de obsidiana sirven para aliviar los dolores menstruales.
Por otro lado, el uso de los huevos yoni no se recomienda para menores de edad, para mujeres embarazadas ni tampoco se emplea durante los días de la menstruación.
A nivel energético, los huevos vaginales, al estar en contacto con la zona de los órganos sexuales, sirven para sanar esas heridas emocionales — relacionadas con nuestra vida sexual— que nos han producido traumas o bloqueos que no nos permiten disfrutar plenamente de nuestra sexualidad o que afectan nuestras relaciones sexoafectivas. Los huevos yoni son entonces herramientas terapéuticas que trabajan más allá de lo físico.
Estos huevos vaginales, tal como su nombre lo dice, se usan vía vaginal pero van acompañados de algunos ejercicios y técnicas, además de que cuentan con unas pautas concretas para un empleo adecuado. El tratamiento con estos huevos de obsidiana consiste en colocarlos en la vagina antes de dormir y retirarlos por la mañana.
Al igual que las bolas chinas, los huevos yoni son introducidos en la vagina y con cada movimiento que una realiza, el movimiento del huevo produce que los músculos del suelo pélvico se contraigan. Esa contracción y la consiguiente relajación que se produce es el ejercicio perfecto para tu vagina.
De todas maneras es muy importante destacar que al comprar un huevo de obsidiana debes ser instruida en el uso adecuado del mismo para que sepas cuándo debe usarse, cuánto tiempo debe permanecer el huevo en tu vagina y demás indicaciones fundamentales para cuidar tu integridad física y tu bienestar emocional.