Dicen que el cuerpo es muy sabio, por ello, te manda ciertas señales para que te des cuenta que te hace falta tener relaciones sexuales.
Si te cuesta conciliar el sueño o simplemente no puedes dormir todas tus horas porque de despiertas de improvisto, es muy probable que sea por falta de sexo.
Esto se debe a que cuando tú tienes relaciones sexuales segregas oxitocina, una hormona que te produce el sueño placentero.
¿Te has dado cuenta que últimamente tu piel no tiene ese brillo de antes o que ya no se ve tan lozana? Puede ser que no tienes la cantidad de sexo suficiente.
Cuando una persona tiene relaciones sexuales con frecuencia, los poros de su piel se abren y las impurezas salen por completo. Sin impurezas ya no hay imperfecciones en tu rostro.
Al no tener sexo con frecuencia, ya no liberas endorfinas, hormonas encargadas de mantener buen humor y el deseo de sociabilizar. ¡No te encierres!
Ya no te importa la hora, comienzas a imaginarte diversas escenas de sexo donde tú eres el personaje principal. Esto ocurre porque a falta de sexo tu cerebro trata de enviarte esas imágenes mentales para que te desahogues un poco.
Muchos estudios han confirmado que mientras más relaciones sexuales tenga una persona (con responsabilidad), se sentirá más pleno y feliz. Por ende, mientras menos coito exista, más será el estrés y mal humor.
Wapa, recuerda que siempre será importante que vivas tu sexualidad como tú lo creas conveniente: con toda la libertad que desees.