En algún momento de nuestras vidas nos hemos imaginado tener ese negocio soñado y qué mejor que hacer junto a tu confidente, la persona que te conoce mejor que nadie. Sin embargo, nosotras te vamos a decir 13 cosas que debes de tener en cuenta si quieres formar una empresa con tu amigo o amiga.
Recuerda que no todas las empresas que son formadas por amigos tienen éxito, pero para que eso no te pase a ti y no pierdas su amistad debes de leer a continuación:
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Debes de tener en cuenta que la amistad se va a poner a prueba, no una, sino varias veces a lo largo del ciclo de vida de la sociedad que formen. Si crees que podrán superar todos los problemas y diferencias juntas, adelante, sigue.
La amistad deberá prevalecer sobre el vínculo laboral, si esto no se da, serán socios pero ya no amigos. Recuerda que debes de mantener una relación cordial.
Para iniciar bien su nueva empresa, deberán de distribuir los roles correctamente, teniendo en cuenta cuáles son las habilidades y sus preferencias.
Las tareas que a ninguno le gusta hacer, deben de ser asignadas para los dos por igual y luego deben de rotarse a lo largo del tiempo.
Se debe de distinguir entre el capital y el sueldo de cada uno por el trabajo que desempeñan cotidianamente.
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Conforme pase el tiempo se debe dejar de incidir en cada sueldo y el valor que tiene en el mercado, aunque algunos socios terminen ganando más.
Se debe de tener reuniones constante sobre los cambios y mejoras de la empresa pero teniendo en cuenta en qué posición están tomando, la del amigo, socio o empleado.
En algún momento van a tener que liderar grupos y van a tener personas a su cargo y para ello deben de capacitarse.
Lo ideal es dejar de lado a las parejas y al resto de familia, porque podrían inmiscuirse en acuerdos que ustedes ya han pactado.
Deben de tener en cuenta, que en algún momento tendrán hijos y que estos crecen y que en algún momento querrán formar parte de la organización.
Muchas veces es mejor contratar a un gerente o un especialista del mercado y los amigos dedicarse a otra parte de la empresa.
Mantener una comunicación constante y animarse a hablar de todos los temas, aun así los más complicados, porque debes de recordar que sigue siendo tu amigo y podrán entenderse.
Por sobre todo, mantener el espíritu fundacional, ese que había en el momento en que se concibió la idea y las ganas de jugarse el todo por el todo por su empresa.
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Posted by Revista Wapa on domingo, 27 de marzo de 2016