¡Hay una chismosa en tu oficina! Te has dado cuenta que ha metido a todos en grandes aprietos y el ambiente laboral se ha vuelto hostil. ¿Hay manera de remediarlo? ¡Nosotras creemos que sí!
Para volver a la normalidad debes detener a la chismosa. Aprende cómo hacerlo sin dañar sus sentimientos porque, aunque no lo creas, también es un ser humano.
Si no quieres que nadie se entere de tus cosas, jamás le cuentes algo personal.
Muchas son agradables de forma genuina, pero hay muchos que son doble cara.
Cuando te pida tu opinión, mejor calla. Tampoco te tomes el detalle de defender a la persona agraviada, tus palabras siempre serán usadas en tu contra.
TE PUEDE INTERESAR: Diez formas de lograr una excelente impresión en una entrevista de trabajo
No te ofendas de los chismes que dicen de ti, si son falsos, ríete. Si son verdad y realmente te preocupa, entonces haz todo lo posible por enmendarlo y desmentirlo con tus actos.
Tómate tu tiempo para responder si piensas hacerlo. Demuestra con hechos reales que esos chismes no tienen validez.
Aquellos que hablan mal de todos, hablan peor de ti a tus espaldas.
TAMBIÉN LEE: 12 cosas que una mujer emprendedora NO debe hacer
Muérdete la lengua. Si alguna vez creaste un chisme, también te harán mala fama o las chismosas te verán como una potencial aliada y te molestarán.
Es difícil guardar secretos de vez en cuando. Pero guardarte un chisme es lo mejor que puedes hacer.
Si tienes un cargo tienes más oportunidades de crear una norma o hacer una política laboral en la que no esté permitido hacer chismes. Claro que se puede
¡Todo lo contrario! El ambiente se volverá más armonioso y encontrarán formas más sanas de entretenerse.
11. Ignórala.
Cuando la chismosa se dé cuenta que a nadie le interesa sus temas, tendrá que cambiar de temas.
Por que lo sabemos, no hay nada más "sexy" que una chica graciosa que tiene confianza en sí misma -->> http://goo.gl/5mYgao
Posted by Revista Wapa on domingo, 27 de marzo de 2016