Hablar de sexo en tiempos de pandemia podría resultar algo limitado para quienes llevan una vida tranquila saliendo con una sola persona por temor a contraer el SARS-CoV-2; sin embargo, muchas veces no estamos seguros de quién podría estar a nuestro lado hasta que una extraña sintomatología empieza a atacar nuestro organismo.
Las enfermedades de transmisión sexual son otra problemática que debe ser atendida a tiempo con el fin de evitar desenlaces fatales por un mal manejo del tema o por querer arriesgar en algún encuentro íntimo sin tomar las medidas de prevención.
Desde pequeños, en las escuelas, los profesores nos han explicado el método anticonceptivo más básico que puede llevarnos a tener una vida sexual segura: el condón. Asimismo, esta alternativa ayuda a no generar un embarazado no deseado que en el futuro termine siendo un inminente de aborto porque no está en los planes de los protagonistas ser padres.
Según los especialistas, las ETS no siempre presentan síntomas y en algún momento podemos contraer algún tipo de acto sexual con una persona que, aparentemente, está bien de salud pero que no saben que presentan una infección.
. Llagas o protuberancias en los genitales o en la zona oral o rectal
. Dolor o ardor al orinar
. Secreción proveniente del pene
. Flujo vaginal inusual o con olor extraño
. Sangrado vaginal inusual
. Dolor durante las relaciones sexuales
. Dolor e inflamación de los ganglios linfáticos, particularmente en la ingle, aunque a veces más extendidos
. Dolor en la parte inferior del abdomen
. Fiebre
. Erupción en el tronco, las manos o los pies
. Causas que provocan una ETS
. Bacterias (gonorrea, sífilis, clamidia)
. Parásitos (tricomoniasis)
. Virus (virus del papiloma humano, herpes genital, VIH)
. Una forma de evitar una transmisión de enfermedad sexual es no teniendo relaciones
. No ingerir alcohol o consumir drogas
. Acudir a un médico especialista para iniciar un tratamiento