Cuando comienza tu ciclo menstrual, estás más que consciente que se vienen una serie de cambios a tu cuerpo, llevándose el protagonismo cuando deseas tener relaciones sexuales. Algunos puedes utilizarlos para repotenciar tu calidad sexual, mientras otros podrían limitarte si así lo crees.
Mayor tamaño del clítoris
Un reciente estudio reveló que antes, durante y después de la ovulación, el clítoris puede llegar a hincharse y crecer hasta 5 veces más de su tamaño normal. Se presume que puede haber más sensibilidad en esa área, pero no está comprobado.
Aumenta tu lubricación
Como si se tratase de un momento de excitación, en los días cercanos a tu ovulación aumenta tu lubricación considerablemente debido a que fluye en esa zona más sangre de lo normal. Esto puede influir en la calidad de tus relaciones sexuales, debido a que contarías con la lubricación perfecta para ese momento, pero deberás tener mucho cuidado del lugar que elijas para no dejar ningún tipo de rastro.
Sensibilidad en los senos
Últimos estudios científicos han confirmado que durante el inicio del proceso de ovulación, las mujeres tienen mucha más sensibilidad en los senos. En muchos casos se les hinchan, mientras que una minoría siente dolor dependiendo el día que se encuentren de su ciclo menstrual. Por ello es muy importante que estés atenta a todos tus cambios hormonales, así podrás saber en qué momento esa sensibilidad te dará placer o no.
La posición de tu cérvix
Como debes saber, tu cuerpo cambia por completo cuando estás con tu menstruación. Y uno de los primeros afectados es tu cérvix, el cual normalmente se encuentra en la parte baja de tu abdomen. Pero en esos días su posición cambia drásticamente y se eleva unos centímetros. Para algunas es una sensación incómoda, pero para otras mujeres, significa tener el momento más placentero en la intimidad porque se vuelven más sensibles. Solo depende de cómo lo veas: o es un pequeño problema o un gran beneficio.