Bisabuela libre tras pasar 11 años injustamente en prisión: "Puedo ver salir el sol"
María Méndezes el nombre de la mujer inmigrante enEstados Unidosque fue injustamente condenada por el asesinato de su nieto, y hoy tras 11 años quedó en libertad.
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En Estados Unidos el caso de María Méndez acaparó la atención de todo el país y el mundo, debido a que fue injustamente condenada por el asesinato de su nieto de 9 meses y pasó 11 años dentro de una prisión; sin embargo, hoy está libre, y pese a que lo perdió todo, agradece que "puede ver el sol" nuevamente.
Pese a los años perdidos, la bisabuela salió emocionada y corriendo de la prisión estatal al norte de California, donde pasó 11 de sus 64 años de vida al ser condenada por la muerte de su nieto, que hoy fue considerado como "accidental", según el jurado que analizó nuevamente el caso.
María fue sentenciada a 25 años de prisión en el 2009, con la posibilidad de permanecer en prisión por el resto de su vida, pero logró salir en libertad y tuvo que regresar a México, su país natal. "Puedo sentir el aire, puedo ver las aves, puedo ver salir el sol, me siento tan feliz de estar afuera", expresó María al canal local NBC4.
"En este momento no quiero pensar en esos días tristes, porque me siento mal", comentó sobre su larga estancia en la cárcel estatal Central para Mujeres en Chowchilla.
EL MISTERIOSO CASO
Enmanuel, su nieto de 9 meses falleció repentinamente en el 2006 cuando estaba bajo su cuidado, y 7 meses después María fue arrestada y acusada de asesinato. La Fiscalía indicó que agitó violentamente y lastimó al bebé, incluso el médico argumentó que había sufrido una lesión traumática una o dos horas antes de la llegada de los paramédicos.
Project for the Innocent de la Escuela de Leyes Loyola, una ONG que defiende a los presos inocentes tomó el caso y usó nueva evidencia para ayudar a la inmigrante, concluyendo que se trató de una muerte accidental al analizar una tomografía computarizada del cerebro del menor, prueba que no vio el jurado del 2009.
LA DEFENSA DE MARÍA
"Es mi firme convicción que María Méndez(...) fue condenada injustamente", fueron las palabras del médico forense Frank Sheridan, el cual señala que el abogado de María ignoró preguntarle varios aspectos del caso, por lo que siente culpa por su injusta condena.
Otros médicos revelaron que habría sido una caída accidental días antes, pero las consecuencias se produjeron cuando María estaba bajo el cuidado de su nieto. Esta nueva evidencia refutaba el parte médico inicial sobre la lesión producida dos horas antes de la llegada de los paramédicos.
Tras su salida, la inmigrante se fue a México para evitar ser detenida por Inmigración y hoy solo busca reconstruir su vida luego de perderlo todo.