Disfruta de una deliciosa receta a base de ingredientes altamente nutritivos que aportarán las sustancias esenciales a tu alimentación.
Prepara este postre e inclúyelo tranquilamente como parte de tus desayunos nutritivos. Su ingrediente principal es la quinua, la cual es incluida dentro de la dieta de miles de deportistas, según la nutricionista Barbara Lewin menciona que en 8 gramos de cereal puedes obtener el doble de proteínas que otros alimentos de su mismo origen.
Además, gracias a su contenido en fibra beneficia el control de colesterol en la sangre de nuestro organismo lo que significa que puede prevenir problemas cardiovasculares. Por otro lado, la quinua es reconocida por sus aportes a la disminución de la anemia, por lo que no dudes en buscar todas las formas de comer este delicioso cereal.
Esta mazamorra no necesita grandes porciones de azúcar, incluso, podrías omitir ese ingrediente, sucede que el plátano aporta ese dulce natural suficiente para una receta increíble.
En la siguientes líneas te vamos a enseñar cómo preparar una deliciosa mazamorra de quinua con plátano y leche, en tres simples pasos. Atenta y toma nota:
1 1/2 tazas de agua
3/4 taza de quinua, enjuagada y escurrida
2 taza de leche entera
2 plátanos maduros
2 cucharadas de azúcar
Sal al gusto
1/2 cucharada de mantequilla
1/2 cucharadita de extracto de vainilla
¿Cómo preparar la mazamorra de quinua con plátano?
Recuerda que para preparar cualquier receta debes ser minuciosa en cuanto a la higiene, desde el lugar de cocina hasta los utensilios y manipulación de alimentos. ¿Lista?
Empecemos, lo primero que vamos a hacer es colocar en una olla mediana: el agua y la quinua, a fuego alto hasta que rompa hervor.
Luego, reduce el fuego a medio-bajo, tapa y cocina durante 15 minutos.
Mientras, licúa la leche con los plátanos, azúcar y sal. Agrega este preparado a la olla con quinua.
Calienta la quinua con leche a fuego medio hasta que tenga poco a poco, verás cómo adquiere la consistencia deseada. Retira del fuego. Añade la mantequilla y la vainilla, y revuelve.
- Si queremos una receta nutritiva, no dejes hervir la leche, podría perder sus propiedades.
¡Listo! Disfruta caliente, tibia o fría esta deliciosa receta.