¡Fan apasionada! Gritó tan fuerte las canciones de su banda favorita que sus pulmones colapsaron

Asistir al concierto de tu cantante o agrupación favorita es tan emocionante que no pierdes oportunidad en gritar y corear tus canciones favoritas. Es tanta la adrenalina del momento que es probable que hayas quedado ronca o sin voz al día siguiente, lo cual es muy común, pero la historia de esta fanática fue única.

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Ocurrió hace un par de años y se ha vuelto noticia porque su experiencia forma parte de un estudio. Se trata de una adolescente de 16 años que fue al concierto de la popular y ahora separada boy band ‘One Direction’, esa noche era la más esperada para ella luego de convencer a su madre de que la acompañase.

Saltó, gritó y cantó como las demás ‘directioners’ y regresó sin problemas a su casa luego de la emoción de ver a sus artistas en el escenario. Al día siguiente despertó con dificultades para respirar, la chica siente que le faltaba el aire y no parece regresar, por eso es llevada por sus padres al hospital.

Al llegar a emergencias es atendida de inmediato y pasa por una serie de evaluaciones, pues no padecía algún problema respiratorio crónico ni tenía antecedentes de ello. Tras ser auscultada por el médico no parece tener problema alguno, pero cuando empieza a palpar el pecho encuentra algo insual.

Le realizan una radiografía y se confirma las sospechas, había aire en lugares equivocados, exactamente en el cuello, la faringe y la cavidad del pecho. La imagen también revela que los pulmones están colapsados y ligeramente hundidos, pero la muchacha no siente dolor alguno. Leer el diagnóstico es traumatizante y son tres: neumotórax, neumomediatino, y enfisema retrofaríngeo.

Cuando googleamos cada resultado es más espeluznante que otro, pero ninguna encajaba con lo que le ocurría a la adolescente, pues no presentaba laceraciones, heridas o desgarros. Así fue cuando dieron con un caso insólito, en el trato respiratorio de la jovencita había una abertura pequeña que se abrió cuando hizo un esfuerzo extra al gritar y se cerró inmediatamente después.

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Felizmente, esto no supuso un riesgo para su salud y tampoco complicaciones pues luego de recibir oxigeno pudo regresar a su casa al día siguiente.