Médicos no querían examinarla y la mandaron a su casa, pero puso sus síntomas en Google y sintió su mundo desmoronarse [FOTOS]

¿Te has imaginado ir al hospital y que se nieguen a atenderte por una cuestión de un sesgo mental? Bueno, te vamos a contar la historia de una joven llamada Abby Landy que tuve que prácticamente rogarles a los médicos para que la atiendan y puedan diagnosticarla de la enfermedad que tanto temía haber contraído.

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La joven inició una relación amorosa y luego de tener relaciones sexuales con ese chico se sintió afiebrada y con escalofríos, entonces, decidió ir al hospital pidiendo que le hicieran los exámenes de enfermedades de transmisión sexual correspondientes. Pero, tuvo que pedirlos varias veces porque ellos solamente querían darle antibióticos.

Viendo que todos los análisis salieron negativos, la enviaron de regreso a su casa. Ese fue el momento más difícil. Intranquila, decidió buscar ayuda en otro lugar: Google. Anotó sus síntomas para ver que aparecía… y la respuesta la dejó en shock: VIH.

“No es necesario. Tú sabes, eres una mujer australiana y heterosexual, las posibilidades de que tengas contacto o de que te contagies el SIDA son tan mínimas que hacer el examen es verdaderamente innecesario”, le dijeron los médicos a Abby cuando insistió que le realizaran una examen para descartar el SIDA.

El resultado que arrojó la prueba era lo que ella se temía, pero esperaba: positivo. Sintió vergüenza, ya que en el mismo hospital juzgaban a quienes tenían VIH. No podían creer que ella, siendo heterosexual, lo hubiese contraído.

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"Me sentía avergonzada, pero encontré grupos privados con otras mujeres que habían obtenido un positivo… sentí que mi situación me permitió tener el privilegio de hablar acerca de mi experiencia. Después del diagnóstico soy la misma persona. Tienes un virus en tu cuerpo, pero todavía tienes la misma alma y la misma mente”, señala Abby quien ahora ha iniciado una campaña para que tanto hombres y mujeres se realicen estos exámenes de rutina.