¡Evita la envidia! Siete razones de cómo afecta a tu cuerpo

La ciencia confirma que los sentimientos positivos y negativos generan cambios en el cuerpo humano. Estos se manifiestan con múltiples síntomas. Por ejemplo, la envidia produce mala salud física y desesperación emocional.

Toda esta emoción negativa afecta al organismo con trastornos que en ciertos casos es difícil de diagnosticar, por esta razón realizamos una lista de los efectos que se generan en el cuerpo al sentir envidia.

1. Los sentimientos además de alterar el estado mental también lo hacen a nivel físico. Esto es natural porque el cuerpo se adapta para reaccionar a peligros, oportunidades o para interactuar.

2.  Al sentir envidia, la postura cambia, es más rígida y tensa. Una señal es que el tronco se echa ligeramente hacia atrás y los movimientos muestran rechazo. Esta tensión llega a producir espasmos musculares y dolor de articulaciones.

3. Un estudio de la Universidad de Helsinki indica que los sentimientos negativos también provocan que las personas rechinen o aprieten los dientes sin ser conscientes de ellos. Por consecuencia, desgastan sus dientes, presentan problemas de oclusión, en las articulaciones de la mandíbula.

4. El resentimientos que genera la envidia provoca que el sistema inmune se debilite, ocasionando más susceptibilidad a enfermarse de infecciones gastrointestinales, en las vías respiratorias y hasta herpes.

5.  El cuerpo responde con ansiedad ante la percepción del desafío. En respuesta surge sensación de sequedad en la boca, latidos rápidos del corazón, mareos, fatiga, temblor, dolor de cabeza, ira e incapacidad de concentrarse, entre otros síntomas.

6. Los pensamientos negativos  generados por la envidia hacen que el cuerpo comience a producir más cortisol y adrenalina, generando estrés, lo que afecta a los sistemas  respiratorio, cardiovascular y digestivo.

7. Los pensamientos de hostilidad por la envidia hacen que tu mente no esté tranquila y te sea más difícil dormir o descansar con calidad.

No dejes de leer: Cosas que solo entienden las chicas que estudiaron en colegios de mujeres