OMS detiene estudios de la hidroxicloroquina para tratar la COVID-19

En un reciente informe que realizó la Universidad de Harvard, en 671 hospitales de 6 continentes, dio como resultado que el 40 % de pacientes COVID-19 que se medicó con hidroxicloroquina combinando con otros antibióticos como la azitromicina o claritromicina murieron.

Después de hacerse pública esta investigación, la Organización Mundial de la Salud (OMS) decidió suspender momentáneamente, por motivos de prevención, el estudio de la hidroxicloroquina como potencial tratamiento contra el coronavirus.

La medida fue tomada luego que la revista The Lancet revelara que los pacientes graves de COVID-19 tratados con ese medicamento tenían más posibilidades de muerte.  El director general de la OMS lo dio a conocer a través de una conferencia de prensa en Ginebra.

El objetivo del estudio fue contabilizar el número de pacientes que fallecieron después de recibir los diferentes esquemas de tratamiento, y la aparición de arritmias ventriculares, el tipo de trastorno eléctrico del corazón más grave por su potencial de causar un paro eléctrico cardíaco.

Los resultados indicaron que- tomando como base la mortalidad en el grupo control- aquellos que recibieron hidroxicloroquina, tuvieron 33 % mayor riesgo de morir que los que no ingirieron esa medicina.

De igual forma, entre aquellos que recibieron hidroxicloroquina con el antibiótico azitromicina o claritromicina, la mortalidad fue 44% mayor.

Los datos concluyen también que la aparición de graves problemas del corazón fue más frecuente en los pacientes que recibieron ambas combinaciones de medicamentos.

Los autores afirman que su estudio no pudo confirmar el beneficio de usar hidroxicloroquina o cloroquina, ya sea solos o combinados con antibióticos, en pacientes hospitalizados con COVID-19.

Concluyen también que esos tratamientos estuvieron vinculados a una menor supervivencia durante la estancia hospitalaria, y a una mayor frecuencia de arritmias ventriculares.

Es importante indicar que el estudio solo se centró en pacientes hospitalizados, quedando pendiente la publicación de estudios en pacientes ambulatorios que estén recibiendo hidroxicloroquina sola o combinada con azitromicina y determinar si ese tratamiento, puede prevenir las complicaciones de la enfermedad.