¿Las dietas extremas son las más efectivas? 5 mitos que te harán pensarlo 2 veces

A pocos días de llegar el verano, mucho se encuentran buscando diferentes dietas para lograr bajar de peso de manera rápida y efectiva; sin embargo, no siempre a las que se recurre son las más recomendadas.

Debes de saber que las dietas sin supervisión que prometen lograr la figura que tanto deseas te pueden generar alteraciones como desnutrición, anemia, cansancio, daños irreversibles en el hígado, baja productividad, mareos, gastritis, alteración del metabolismo y el terrible efecto rebote.

Ante esta situación y con el fin de evitar que seas vulnerable a alguna enfermedad o complicación, la nutricionista Carla Torres Fernández- Cabero, del Centro de Medicina Estética de la Clínica Ricardo Palma, menciona los peligros y mentiras de las cuatro dietas milagro más conocidas. ¡Atenta y toma nota!

No existe la píldora o batido que nos lleve a una pérdida de peso saludable. Ambos son productos que no vamos a consumir a lo largo de la vida, ambos crean un desorden en nuestro metabolismo porque lo fuerzan a realizar procesos de manera agresiva y por estas razones nos generan un efecto rebote cuando regresamos a nuestra rutina diaria de alimentación.

En el caso de las pastillas, muchas alteran el trabajo de nuestro hígado generando daños irreversibles.

Los batidos reemplazan la alimentación y cualquier persona que solo viva de consumir un mínimo de calorías provenientes de un polvo puede llegar a caer en desnutrición.

Cada persona tiene un requerimiento tanto de calorías (energía para realizar nuestras actividades), macro y micronutrientes (vitaminas, minerales) y agua. Si dejamos de incluir estos elementos en nuestra rutina diaria o si disminuimos su consumo en cantidades no adecuadas para nuestro organismo, comenzaremos a desarrollar diferentes enfermedades como la anemia (deficiencia de hierro en la alimentación) lo que causa fatiga, cansancio y falta de concentración. Se puede alterar la glucosa, se puede alterar la presión arterial, podemos experimentar mareos, y en muchos casos inclusive desarrollar una gastritis. Este método también causa un efecto rebote.

El agua natural no tiene calorías. Por lo tanto, no engorda ni adelgaza si se toma antes, durante o después de las comidas. Si la función de los riñones es normal, no es esperable aumentar de peso al beber agua. El agua es básica dentro de diversas funciones en nuestro organismo, dejar de consumirla sería muy dañino para nuestra salud.

La avena, al ser un cereal, tiene un alto contenido en fibra, por lo que aumenta su volumen en el estómago y potencia la sensación de llenura. Mezclar la avena ayuda a absorber mejor sus vitaminas y proteínas. Sin embargo, no existe ningún producto ni ninguna forma de tomar la avena (como diluida en agua o leche) que potencie sus cualidades y mucho menos bajar de peso.

El profesional responsable de este campo es el nutricionista, él brinda una recomendación personalizada y segura. Esta carrera es de cinco años y en los tres primeros se llevan cursos de medicina, como anatomía, embriología, fisiología, bioquímica, bioética, entre otros, que permiten que este profesional se encuentre debidamente preparado para entender el funcionamiento del cuerpo de manera integral.  A este periodo se le suman dos años en los que se especializan en dietética.

Las personas que tienen problemas de colesterol y triglicéridos elevados, hipertensión arterial, diabetes o cardiopatías, las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, y aquellas que aún se encuentran con una necesidad alta de nutrientes como los niños o adolescentes, podrían poner en riesgo su estado de salud al optar por estas dietas.