¿Quieres olvidar a tu ex? Esta técnica te ayudará a curar el corazón roto

A todos nos “han roto el corazón”, a veces por razones que nuestra mente no entiende, pero la necedad o el pago hace que sigamos ahí esperando que esa persona nos hable o incluso nosotras misma buscándola, asegurando que todo estará bien que solo es cuestión de tiempo. Sin embargo, no existe nada más falso que eso y esto complica la ruptura amorosa.

Es aquí donde utilizamos el squealing, una práctica que consiste en llenar los instantes de terquedad y desesperación con dosis de realidad para construir un entorno favorable que te ayude a salir a flote naturalmente, sin caer en una espiral decadente de la que te cueste aún más trabajo salir.  Por ello, te damos estos consejos para olvidar y superar a tu ex.

No se trata de unirte a una sesión de ayuda, ni nada parecido; sólo debes tener en mente al menos a tres de las personas que nunca te podrían fallar y en quien confías incondicionalmente, aquellas que están en los momentos más duros y consideras invaluables en tu vida.

Una vez que las hayas seleccionado y tengas la seguridad de que no se podrán negar, debes acercarte a cada uno por separado y hacer tu primera denuncia con toda sinceridad: “A veces me siento vulnerable y necesito de tu ayuda para dejar de llamarlo o pensar en él”, “necesito saber que todo puede estar bien sin buscarlo y sé que puedes darme esa certeza”. Un primer squealing bien hecho será la mitad del trabajo.

Esto no significa que te entretengas con lo más banal o en actividades que nunca acostumbras con tal de no caer en cuenta de que tu relación llegó a su fin, sino todo lo contrario: con plena conciencia de que lo suyo no dio para más, cierra el ciclo gradualmente y acepta invitaciones de amigos

 Aunque lo evites a toda costa, en algún momento se te presentará una situación similar. Escuchaste esa canción especial y estás a punto de marcarle: es ahora donde antes de cometer el gran error, debes llamar o escribir a alguna de las personas disponibles de tu grupo de apoyo en vez de dirigirte a tu ex.

 En el momento de desesperación, expresa a tus amigos exactamente qué es lo que sientes y porqué estabas a punto de llamarlo. Piensa y responde objetivamente: ¿Qué le habrías dicho? ¿Habría servido de algo? ¿En verdad te parecía buena idea, o sólo fue parte de un arrebato de ansiedad?

 Una vez que entres en razón y descubras cuán estúpido habría sido llamarle o salir a buscarlo, la tranquilidad volverá a tu vida. No sólo te sentirás aliviada, también saldrás fortalecida y te darás cuenta que aquél momento sólo fue un lapsus.

Wapa, debes ser consciente que con este método también necesitarás tiempo, nadie deja de querer de la noche a la mañana, pero tu inquietud por volver a buscarlo perderá fuerza y en menos tiempo del que crees, habrás superado la ansiedad de buscar a esa persona.