¿Sabes qué es la idealización del amor?

Es probable que haya repetido frases como “el amor lo puede todo”, “cambiará por mí” o “si no me cela, no me ama”, entre otras más. Muchos de estos dichos e ideas se refuerzan en las películas y canciones románticas, y se asumen como si fueran verdaderos, pero ¿en realidad lo son? 

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Uno hereda una serie de patrones culturales y familiares respecto a las relaciones amorosas, que no aportan a la relación de pareja. Es por eso que este tipo de pensamientos lleva a una forma inadecuada o poco funcional de amar a una persona.  

Otro ejemplo son los celos, se piensan que  existen “celos buenos” y “celos malos”, pero realidad solo demuestran una actitud posesiva e inmadura de relacionarse con la pareja, y que está presente tanto en hombres como en mujeres.

Los celos causan malestar en las personas. Evidencian desconfianza e inseguridad,  producen reclamos o conflictos, y en algunos casos, llevan a cometer agresiones, y estas no son expresiones de amor. Sin embargo, muchas personas creen aún que son demostraciones de amor e interés. 

Una relación saludable debe basarse en el respeto y en la confianza, y cuando lleguen se presenten problemas o dificultades, se deben buscar soluciones de manera tranquila, dialogando y negociando. Pero ¿qué sucede cuando existe violencia dentro de la relación?

Por nada del mundo, una persona, ya sea hombre o mujer, debe dejar que su pareja la agreda física ni psicológicamente, pues para todo existe un límite. Cuando sintamos que alguien nos trata mal es una razón, más que suficiente, para alejarnos. 

La violencia no es “normal” en una relación, muchas personas por creer que es así no reaccionan a tiempo y se ven inmersa en esta situación, que coloca en riesgo su integridad. 

Hay relaciones complicadas, que viven inmersas en constantes peleas y reconciliaciones. Sea cual fuere el motivo, se promete una y mil veces que se va cambiar para resolver la situación, pero se vuelve a caer en el mismo error y continúan las discusiones. 

En este punto hay que recordar que uno cambia ciertos hábitos o controla su carácter por uno mismo, porque realmente lo quiere y lo hace de acuerdo a su proceso de crecimiento o de madurez. Pero lo importante es tener conciencia de ello y o, en todo caso, si la relación le está generando intranquilidad es preciso preguntarse: ¿qué es lo que uno espera de ella? 

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