Ver a la novia antes del matrimonio es de mala suerte

Cuando la novia está a horas de casarse, se le aconseja no ver al novio porque sería de mala suerte. Por muchas décadas las féminas han seguido este mito, pero la verdadera razón de esta leyenda es que  anteriormente los matrimonios eran arreglados y los novios recién se conocían en el altar.

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En esos tiempos, era considerado de ‘mala suerte’ que los novios se vean las caras porque se corría el riesgo que no surja ninguna atracción ni gusto entre ellos. De esta manera, se evitaba que uno de los contrayentes huyera. El que evite un encuentro se estableció como regla. Incluso, no podían saber del otro ni siquiera minutos previos al iniciar la ceremonia.

Esta superstición no tenía nada de romántico tanto como ahora, ya que la novia asombra al novio con su belleza y con su vestido blanco. Es así, que se realiza un momento mágico, después de no verse por días o semanas.

Actualmente, algunos países anglosajones la primera vista que se dan los novios es antes de la boda. En ese momento, los futuros esposos se encuentran en un lugar pactado acompañados de un fotógrafo, quien congela esos momentos en imágenes en el cual comunican sus emociones  y nervios.

Algunas parejas conviven. En este caso, la novia retorna a la casa de sus padres en donde comparten un momento de alegría con sus familiares.

Wapa, ¿prefieres no ver al novio o verlo antes de la boda?

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