Dos sujetos armados abordo de una moto lineal acabaron con la vida de William Oswaldo Olivera (63) quien se dedicaba a la venta de productos de ferretería en la galería ubicada en la cuadra 4 del jirón García Villón en Las Malvinas, Cercado de Lima.
Luego de haber terminado con sus labores, los comerciantes de Las Malvinas siempre de reunían para conversar y jugar póker en la esquina del inmueble, pero ese día Olivera decidió no reunirse.
Cansado por el trajín del día, decidió disculparse con sus amigos y prefirió quedarse en su stand descansando, sin saber que instantes después llegaría la fatalidad.
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Un sujeto de estatura baja ingresó a la galería, sacó un arma de fuego y sin decir palabra alguna, disparó cuatro veces contra William para luego darse a la fuga con rumbo desconocido.
Fue entonces que los comerciantes de la galería se apersonaron al stand de Olivera para auxiliarlo y derivarlo al hospital Arzobispo Loayza, pero falleció en el trayecto.
"Escuché los disparó y corrí a verlo, no podía creer lo que había pasado, lo abracé fuerte y le decía "sé fuerte, no te mueras… Tú eres fuerte, resiste”, lo llevé al hospital y luego de 3 intentos por reanimarlo los médicos me dicen que estaba muerto", indicó el mejor amigo de Olivera, quien también es comerciante.
URPI de La República llegó al lugar y conversó con algunos comerciantes quienes prefirieron mantener su identidad en reserva por temor a represalias.
Allí confesaron que fueron testigos de los múltiples hostigamientos que era víctima William Olivera por parte de sujetos que eran enviados por su esposa.
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"Él tenía un cuñado que había salido de la cárcel y siempre venía a decirle que entregue sus puesto a su hermana, pero William decía que nadie le iba a quitar sus tiendas y por eso lo puso todo a nombre de su actual pareja", indicaron.
Agentes de la Policía Nacional se apersonaron al lugar e indicaron que los criminales no le robaron sus pertenencias ni el dinero de su negocio al occiso.
Pese a que los efectivos PNP activaron el plan cerco, no lograron capturar a los sicarios.
Olivera deja dos menores hijos de 13 y 3 años, además de una disputa vigente por la propiedad de 3 tiendas en el Centro Comercial La Chimenea en Las Malvinas.